Dos hombres asesinaron brutalmente a un conocido empresario en su casa cuando regresaba de sus vacaciones familiares en Punta del Este. El hecho ocurrió en Bernal, partido de Quilmes. Los atacantes usaron una toalla y un jarrón de adorno para torturarlo hasta provocarle la muerte. Le pedían un maletín plateado que, según trascendió, nunca nadie vio.
La víctima fue identificada como Abel Leonardo Espósito, un empresario de la industria del cuero de 51 años, que decidió retornar antes de las vacaciones con su familia en Punta del Este para cumplir con compromisos laborales.
De acuerdo a los investigadores, los autores del crimen ingresaron a la vivienda por la fuerza, aparentemente antes del arribo de Espósito. Atacaron, primero, a su empleada, una mujer de 61 años que vive en la parte de atrás de la propiedad, a quien ataron con precintos plásticos y después a él, maniatado con el mismo modus operandi. Mientras lo torturaban con un jarrón con agua y una toalla pedían por un maletín plateado.
«Los delincuentes le preguntaban dónde estaba el maletín y él les dijo que no tenía ninguno», expresó a Télam una fuente cercana al caso que no rechazó que los atacantes hallan manejado una información equivocada.
La causa quedó a cargo del fiscal Leonardo Sarra, de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 2 del Departamento Judicial Quilmes. El deceso se produjo por “asfixia mecánica”. Se le detectó líquido en los pulmones.
