Un grupo de padres rosarinos insistió este viernes en la vuelta a las clases presenciales de cara al ciclo lectivo 2021. Lo hizo en el marco de una reunión con el presidente de la Cámara de Diputados, Miguel Lifschitz, y la titular de la Comisión de Educación de la Cámara baja y exministra Claudia Balagué.
Gilda Ruiz, una de las madres que participó del encuentro, destacó que el grupo presentó ante los legisladores un plan con el «norte puesto en el 100% de la presencialidad para el 100% de los chicos» y planteó la idea «un plan de contingencia en el caso que sea necesario».
Además, afirmó la necesidad de declarar la educación como tarea esencial «porque parece ser que hay gente que tiene dudas todavía y trabaja de una manera que no se condice con eso».
A su turno, Alfredo Sanz, otro de los padres que asistió, aclaró que no pertenecen a ningún partido político. «Lo único que queremos es que abran las escuelas», aseguró.
Por otra parte, remarcó que «el efecto más grande que tuvieron los chicos fue el corte con sus relaciones más cercanas. Fue una frenada violenta a su manera de relacionarse».
«Somos un grupo de padres que tenemos la fortuna de haber sostenido la continuidad a través de la virtualidad porque tenemos los medios para hacerlo, pero hay miles de familias en Argentina que no tienen esta oportunidad, que son mucho más vulnerables a esta situación. Ellos debieron interrumpir la continuidad», concluyó.
