Lifschitz apuntó a dirigentes gremiales «muy politizados» y defendió el aumento salarial por decreto
El gobernador Miguel Lifschitz se refirió este miércoles al decreto a través del cual se oficializará el aumento salarial de un 18 por ciento en dos tramos. «Esto no es cerrar paritarias, ni un gesto autoritario. La paritaria no se cierra, se mantiene el diálogo con los dirigentes gremiales. Pero vamos a tomar la decisión de que los docentes cobren el incremento como el resto de trabajadores públicos. El decreto es la única forma que tiene el gobierno para disponer los fondos», aseguró en una conferencia de prensa desde la capital de la provincia. El nuevo incremento, no firmado en paritarias, sumó las críticas de los sectores gremiales, ante los cuales también apuntó Lifschitz. «Los dirigentes están muy politizados. Nosotros no tenemos nada que ver con las propuestas educativas y sociales del gobierno nacional. Si hay cuestionamientos a Nación, hay que expresarlos donde corresponda».
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Los gremios acusaron al gobierno provincial de «antidemocrático»
Tal como el ministro de Gobierno este martes, Lifschitz apuntó a que el decreto del incremento salarial se puso en práctica automáticamente desde la aprobación de UPCN de la oferta. Sin embargo, las repercusiones se sintieron fuerte y con ellas el rechazo a la metodología. Frente a eso, el gobernador realizó una conferencia de prensa para «dejar en claro los pasos dados hasta el momento».
«Desde febrero mantuvimos reuniones para tratar de buscar un acuerdo y consenso. El contexto general, mientras, nos marcó que casi nadie superaba el 15 por ciento de aumento. Esa era la pauta fijada a nivel nacional tanto para lo público como lo privado, y es lo que arreglaron muchas provincias, la mayoría, además, en tres tramos», relató Lifschitz.
El gobernador apuntó a que la primera propuesta de la provincia ya fue diferente al resto: un 16% en tres tramos. Y que la última fue superadora: 18 por ciento en dos tramos de 9 puntos cada uno, y manteniendo la cláusula gatillo. «Aclaramos que era el máximo esfuerzo de la provincia. Contó con un visto bueno favorable de los dirigentes sentados en la mesa, pero evidentemente hubo cambios de opinión en el camino y algunas gremios aprobaron y toros rechazaron», remarcó el gobernador. Y apuntó nuevamente a los gremios: «Los dirigentes sabían que era nuestra máxima propuesta. No sólo por lo que podemos garantizar, sino porque Santa Fe no es una isla y no podemos salir del contexto general. Frente a eso, nuestra propuesta sigue siendo la mejor de la Argentina».
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