El gobierno resolvió este martes imponer por decreto el aumento del 18 por ciento que había sido rechazado por los trabajadores estatales y docentes en las reuniones paritarias. La noticia la dio el ministro de Gobierno, Pablo Farías, y de inmediato generó una reacción de los gremios que consideraron la decisión como unilateral.
Horas más tarde, AMSAFE emitió un comunicado desde donde apuntaron contra las autoridades de la provincia, diciendo que de esta forma, se rivaliza y que el esquema que proponen es similar al del Ejecutivo Nacional que dispuso anular la vigencia y validez de la Paritaria como ámbito democrático de discusión del salario y condiciones de trabajo.
“Este accionar responde indudablemente al quiebre de la autonomía provincial que produjo la firma del Pacto Fiscal por parte del gobierno santafesino y ratificado por la Legislatura, que pone un techo a la paritaria y restringe gravemente el derecho de los trabajadores a la negociación colectiva”, explica el comunicado.
Para finalizar, la notificación informa: “Repudiamos además cualquier intento de aplicar descuentos sobre los haberes docentes en resguardo del derecho de huelga consagrado en la Constitución Nacional y ratificamos a la vez, el paro del 4 y 5 de abril, resuelto por la Asamblea Provincial de AMSAFE con el voto de más de 30.000 compañeros, en el caso de que el gobierno no reabra la Paritaria”.
También, en la tarde de este martes, Javier Almirón, secretario gremial de AMSAFE, dialogó con el periodista Andrés Cánepa en Radio Mitre Rosario y dijo que esta situación ha generado bronca y un gran rechazo entre todos los trabajadores estatales. “Entendemos esto como una caída más en la calidad democrática de este gobierno provincial”, indicó el dirigente.
Para continuar señaló que hay “un compromiso político” del gobierno provincial con el gobierno nacional que “no puede salirse de un porcentaje establecido” que es el porcentaje de referencia. “Creo que estas son señales y nos preocupa que el modo de resolverlo tenga más vínculo con lo que pasa en Buenos Aires con María Eugenia Vidal que lo que se venía realizando con los gobiernos anteriores en la provincia de Santa Fe”.
Asimismo, el tema de la clausula gatillo es una de las cuestiones que debía resolver el gobierno, y que según Almirón, se está ejecutando como política salarial 2018 algo que se obtuvo en el 2017.
Ante esto los gremios ven a esta situación como una merma en la credibilidad sobre el instrumento paritario. “Nosotros creíamos que la provincia estaba en condiciones de mejorar y la firma de un decreto nos pone a pensar que podría pasar en una nueva paritaria, que cuando no estén conformes lo terminen así abruptamente” argumentó el referente gremial.
Quien también dio su punto de vista, fue el secretario general de SADOP, Martin Lucero, en representación de los docentes privados. Para el referente este decreto “le pone una partida de defunción a la paritaria”. Y además dijo: “Es un cierre abrupto que de alguna manera condiciona el devenir futuro de los trabajadores y las trabajadoras del sector público estatal y los docentes privados”.
Por esa razón Lucero sostuvo que lo que más representa el sentir de los docentes con lo ocurrido el día de hoy, es el cierre de una etapa muy productiva y provechosa para la defensa de los derechos de los trabajadores.
En efecto, el representante, consideró como “un error político” de parte del gobierno provincial y argumentó que es un clima de época. “Creo que el alineamiento del el gobierno provincial con el gobierno nacional es muy peligroso y que de alguna forma no respeta las tradiciones políticas de nuestra provincia”.
“En este sentido el hecho de que se imponga por decreto una paritaria que te descuenta del aumento de este año la clausula gatillo del años pasado, es decir que te paga tu aumento con tu propio aumento de manera autoritaria y unilateral , un acuerdo que es pernicioso para los trabajadores”, finalizó.
