Karen White, prisionera transgénero violó a cuatro reclusas en una cárcel de mujeres. Durante años vivió como un hombre llamado David Thompson. Acusada de violar sexualmente de una mujer, fue enviada a una prisión femenina y allí continuó con sus actos indecedentes.
Lo insólito es que era una delincuente sexual y pedófila condenada. Y todos sus ataques sexuales habían sido cometidos cuando era un hombre. Incluso White no tuvo cirugía de reasignación de género cuando fue a la prisión New Hall. El lugar, solo para mujeres, se encuentra cerca de Wakefield, West Yorkshire, Inglaterra, donde tuvieron lugar los nuevos actos contra las cuatro víctimas.
Según informa DailyMail, mientras White permanecía encerrada allí, aprovechó la oportunidad de vivir junto a las reclusas para llevar a cabo más abusos. El caso podría llevar a una revisión de las reglas para tratar con los reclusos transgénero en el sistema penitenciario inglés.
