La ola de calor azota a casi todo el territorio argentino, con algunos matices. En ese marco, Servicio Meteorológico Nacional (SMN) emitió alertas rojo, naranja y amarillo para distintas regiones del país. A continuación, los detalles.
Catamarca, La Rioja, San Juan, Mendoza y La Pampa se encuentran bajo alerta rojo. Lo mismo ocurre el este de Córdoba, en las localidades de Pocho, San Alberto y San Javier; en la zona baja de Belgrano y Juan Martín de Pueyrredón, en San Luis; El Cuy y General Roca, en Río Negro; y el este de Añelo, Pehuenches y Picun Leufú, en Neuquén, de acuerdo al último reporte del SMN.
En esos distritos, según consigna Télam, se esperan para esta semana máximas de entre 40 y 43 grados para este miércoles. Así las cosas, las temperaturas esperadas (se prevén máximas de hasta 39 grados en estas zonas) «pueden ser muy peligrosas para la salud, especialmente para los grupos de riesgo».
Por su parte, la provincia de Tucumán, la zona norte de Neuquén, algunas localidades de La Pampa, Mendoza, San Luis, Córdoba y La Rioja; la ciudad de Paraná y ciudades aledañas, en Entre Ríos; y algunas localidades del oeste de la provincia de Buenos Aires, como Adolfo Alsina, Trenque Lauquen y Guaminí, se encuentran en alerta naranja.
En tanto, la ciudad de Buenos Aires, casi toda la provincia de Buenos Aires, Santa Fe, gran parte de Córdoba, Entre Ríos, Santiago del Estero y Salta, y parte de Jujuy, Misiones, Corrientes y San Luis están bajo alerta amarillo.
El significado de los colores de los alertas
- Rojo: Se esperan fenómenos meteorológicos excepcionales con potencial de provocar emergencias o desastres. Cuando rige este tipo de alerta, se solicita a los habitantes que acaten las instrucciones brindadas por las autoridades locales.
- Naranja: Se esperan fenómenos meteorológicos peligrosos para la sociedad, la vida, los bienes y el medio ambiente. En este caso, los ciudadanos deben estar atentos y preparados para lo que puede llegar a ocurrir.
- Amarillo: Posibles fenómenos meteorológicos con capacidad de daño y riesgo de interrupción momentánea de actividades cotidianas. Acá se solicita que las personas estén informadas ante los eventuales problemas que puedan suceder.
