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viernes 26 de abril del 2024

«Nosotros nos sacrificamos y dejamos todo por el club»

Por Joaquín Tell

Lorena Nicolossi hace más de tres años que está a cargo de Sol de Cuyo, un humilde club de la zona norte que en los últimos días sufrió un robo inimaginado: se llevaron hasta los techos de los baños. «Lo que más nos duele es que vos planificas para seguir progresando y te pasan estas cosas que te hacen replantearte todo», dijo la presidenta en una entrevista con Rosario Nuestro.

Ella es ama de casa, trabaja en su hogar y cuida a sus cuatro hijos, dos nenas, y dos varones, que además, juegan al fútbol en el club del cual es la presidenta. Lorena no descansa en todo el día, según ella «va de la casa al club y del club a la casa». Es un trabajo ininterrumpido, constantemente piensa en lo que hay para mejorar en el club y tiene tiempo como para también cuidar de su familia. «Mientras cocino o almorzamos, pienso que tengo que hacer a a la tarde, o me estoy escribiendo con los miembros de comisión o los profes, pienso las 24 horas del día en el club».

Lorena llegó a la presidencia de Sol de Cuyo hace tres años. Primero empezó colaborando como mamá, ayudando a la tesorera a organizar rifas y bingos para ganar un poco de dinero. Al poco tiempo se ganó la confianza del por entonces presidente, que luego de unos meses le dejo su puesto para que ella se haga cargo de la institución. Desde ese momento trabaja incansablemente para cambiarle la cara al club. «Había que pintarlo, techarlo, hacerle el piso que era de tierra. En muy poco tiempo lo logramos, y la gente se da cuenta», remarcó.

Sol de Cuyo no recibe ningún tipo de ayuda por parte de la Municipalidad. Ni económica ni de materiales. Todo lo que consigue, lo hace gracias al esfuerzo y sacrificio de los padres que colaboran en el club. Lorena contó que para eso, se organizan bingos, rifas y ventas de empanadas. Además, dijo que la gente ya sabe como trabajan, entonces colaboran constantemente. «El año pasado tuvimos 200 personas en el bingo y vendimos más de 50 docenas de empanadas». Con ese dinero, la comisión directiva puede mejorar las instalaciones.

«Lo que más nos duele de todo esto es que no podes planificar a futuro, porque después pasan estas cosas y no sabes como volver a arrancar»

Consultada acerca del robo que ocurrió el pasado martes, en donde los ladrones se llevaron hasta los techos, la presidenta se mostró sorprendida y dolida y expresó: «Los techos estaban soldados, se tomaron un laburo bárbaro, nos duele mucho cuando pasan estas cosas». Debido al fuerte accionar social que tiene el club, Lorena sostuvo que prefiere no contarle a los chicos lo que ocurrió y extraerlos un poco de la realidad en que se vive.

«Lo que más nos duele de todo esto, es que no podes planificar a futuro, porque después pasan estas cosas y no sabes como volver a arrancar», fueron las palabras elegidas por Nicolossi para describir el momento.

Para este año, la comisión directiva del club, esperaba poder pagar los uniformes para todas las categorías, algo que hasta ahora viene abonando cada padre. Para demostrar su esfuerzo por superarse, Lorena asegura que «lo vamos a hacer igual, vamos a ver como hacemos».

Pero las buenas ya se acercan, y a corto plazo. El club, con ayuda por primera vez de la Municipalidad, y luego de la trascendencia del caso, pudo poner nuevamente los techos. Además, recibió muchísimas donaciones por parte de la gente que se conmovió con lo ocurrido en la institución de Casiano Casas y Baigorria. A pesar de todos los contratiempos que sufre Sol de Cuyo, lo más importante es que sigue siendo un lugar de inclusión para todos los chicos del barrio, y eso es algo que nunca le podrán robar.