Este jueves se cerró el libro de pases en Argentina y así culminó para Central su séptimo mercado a cargo de la actual comisión directiva. Néstor Ortigoza y Oscar Cabezas fueron los dos únicos refuerzos en este receso y se llegó a la cifra de 32 futbolistas que arribaron al club desde el verano de 2015.
Más allá de esa cifra, con aciertos y errores rigiéndose por los rendimientos individuales de cada uno de los jugadores, el dato llamativo es que 11 de ellos fueron marcadores centrales, es decir un 33 por ciento. Por distintos motivos, el Canalla se tuvo que reforzar siempre en la última línea apelando en contadas ocasiones con recursos genuinos de sus divisiones inferiores.
Jonathan Ferrari, el primero de la larga lista
Con pasado en All Boys y San Lorenzo, y con un último paso en Atlético de Rafaela, Ferrari arribó por pedido de Eduardo Coudet en enero de 2015 y firmó a préstamo por un año. Apenas disputó tres partidos en Central ya que era alternativa a la dupla que conformaron Yeimar Gómez Andrade y Alejandro Donatti. A mediados de ese año, rescindió su contrato.
Desde Alemania llegó el de mayor rendimiento
A mediados de 2015, el Chacho Coudet tuvo uno de sus más grandes aciertos en los mercados de pases. Apuntó a Javier Pinola, que llevaba una década en el Nüremberg alemán y el futbolero medio argentino le había perdido el rastro. El ex Racing tuvo un gran rendimiento en Central y hasta junio de 2017 cuando tuvo su polémica partida a River, disputó 53 encuentros y su nivel lo llevó a la Selección argentina.
En el verano de 2016 llegaron dos zagueros más
Durante el tercer receso de esta comisión directiva, pese a que estaba afianzada la dupla Donatti-Pinola, Central buscó dos defensores más para tener recambio porque se venía la Copa Libertadores. Tras su paso por San Lorenzo regresó al club Mauro Cetto y llegó a préstamo por 18 meses Esteban Burgos proveniente de Godoy Cruz.
El «Colo» padeció mucho por las lesiones, aunque se dio el gusto de jugar su último clásico (0-0 en el Coloso) y marcar su primer y único gol con la camiseta auriazul (a Quilmes, empate 1-1 en el Gigante). A mediados de 2017 decidió su retiro y se convirtió en el director deportivo del club. Por su parte, el salteño tuvo esporádicas chances pero nunca rindió y se fue libre en el receso anterior.
Marcadores centrales al por mayor pidió el Chacho
El cuarto mercado de pases de la presidencia de Raúl Broglia y el último con Coudet como entrenador superpobló la última línea. A préstamo por un año llegaron el uruguayo Hernán Menosse y el ex Olimpo Dylan Gissi, mientras que Central le compró a Morelia de México el pase de Marcos Torsiglieri.
Ninguno se afianzó y de hecho dos de ellos quedaron apuntados por los hinchas como grandes responsables de la caída ante River en la final de la Copa Argentina 2016 por sus groseros errores. La dirigencia tomó la decisión con Torsiglieri y Gissi de que ya no vistan más la camiseta de Central: el ex Boca pasó a préstamo a Racing primero y actualmente fue cedido a Vélez, con la intención de que una venta le haga recuperar al club de Arroyito el dinero invertido.
Por su parte, Gissi acumuló insólitas fallas no sólo en aquella definición en Córdoba sino por ejemplo en el clásico que Newell’s ganó en el Gigante 1-0, entregando un tiro de esquina cuando tenía tiempo y espacio para resolver de otra manera. De ese córner la Lepra facturó con Maxi Rodríguez. Al finalizar su préstamo se marchó.
Menosse sí tuvo su momento de reivindicación cuando Paolo Montero lo incluyó por urgencia ante el eterno rival en el Coloso en el primer semestre de 2017 para marcar punta izquierda. Lo hizo de gran forma en aquel partido y una semana después, pleno de confianza, trepó por su sector a pura enjundia y asistió a Teo Gutiérrez para el primer gol de Central ante Racing en la goleada 4-1 en Arroyito.
Desde Paraguay llegó el octavo
Montero se hizo cargo de la dirección técnica del Canalla en el verano de 2017 tras la partida de Coudet y sabiendo que no podría contar con Pinola lesionado, ni con los «borrados» Torsiglieri y Gissi, también pidió un zaguero. Central compró a José Leguizamón proveniente de Olimpia, quien fue habitual titular con el DT uruguayo, aunque la llegada de Leo Fernández lo hizo regresar a préstamo por 18 años al «Decano».
Uno siempre buscado y otro de recambio
A mediados del año pasado, habían finalizado los contratos de Burgos, Gissi y Menosse sumado a la partida de Pinola a River, por lo que otra vez Central buscó zagueros en el mercado de pases. Primero llegó Marcelo Ortiz a préstamo por un año proveniente de Boca Unidos, pero para ser pieza de alternativa, mientras que Fernando Tobio arribó sobre el cierre del tiempo reglamentario cedido por Palmeiras por una temporada.
El ex Boca debió ponerse a punto ya que realizó la pretemporada apartado del plantel principal del club brasileño y por ende Montero apostó a Mauricio Martínez, habitual mediocampista central, y le dio buenos resultados. Ortiz, por su parte, se sigue recuperando de la rotura de ligamentos.
Usó la Cabezas para completar el «11 de marcadores centrales»
En la última semana de este libro de pases, el séptimo de la actual comisión directiva, el colombiano Oscar Cabezas de 21 años arribó a Central para sumarse por un año a préstamo con cargo y opción de compra proveniente de Patriotas Boyacá, club de su país.
En este período en el que Central incorporó 11 zagueros, los defensores surgidos del club tuvieron escasas oportunidades. Yeimar Gómez Andrade fue titular en el primer semestre de 2015, pero luego relegado por la llegada de Pinola emigró, al igual que Tomás Berra a comienzos de 2016. Tampoco logró afianzarse Renzo Alfani, hoy cedido hasta mediados de este año a Villa Dálmine.
Como parte del plantel actual, el único juvenil en la consideración de Leo Fernández es Luciano Recalde, que al menos en este arranque de competencia oficial peleará su lugar en el banco de suplentes con el recientemente llegado Cabezas.
