Familiares, amigos y allegados de Virginia Ferreyra realizaron un abrazo solidario este lunes por la tarde noche frente al Hospital de Emergencias Clemente Álvarez (Heca) para manifestarle fuerzas a la profesora de danzas árabes, que pelea por su vida tras ser brutalmente baleada el sábado por la tarde en Isola y Maestros Santafesinos.
La convocatoria también tuvo por objetivo pedir justicia por la muerte de su madre, Claudia Deldebbio, quien perdió la vida en el acto en la balacera en zona sur, cuando sicarios dispararon desde dos autos contra una torre ubicada en la zona y las dos mujeres quedaron en medio de la ráfaga de tiros.
Con carteles, fotos y velas, los presentes mostraron su apoyo a la profesora de danzas, quien permanece en la terapia intensiva del efector de salud tras pasar por su segunda cirugía este lunes en horas del mediodía.
Virginia recibió múltiples impactos de bala en varias partes del cuerpo. Si bien su estado es sumamente delicado, tras su segunda operación el parte médico indica que presentó una mejoría y el panorama es un poco más alentador.
“Virginia salió de la segunda cirugía; salió mejor de lo que los médicos esperaban. Hay que seguir poniéndole fuerzas, pero es alentador el panorama hoy, y hace 24 horas no era así”, dijo Mónica, amiga de la profesora, este lunes por la tarde en diálogo con El Puente (Radio Mitre Rosario).
En cuanto al hecho, todavía no hay detenidos, pero el ministro de Seguridad Jorge Lagna manifestó que la investigación está avanzada y se esperanzó en que pronto se esclarecerá el terrible hecho.
En ese sentido, el fiscal Claudio Saldutti explicó la mecánica del atentado por la cual murió la mujer y Virginia y un menor de edad resultaron baleados.
«El sábado alrededor de las 7 de la tarde por Maestros Santafesinos llegando a la esquina de Isola aparecieron dos vehículos, uno de color y gris y otro negro. Desde ambos disparan indiscriminadamente hacia el oeste, hacia la torre 11, que está en la esquina de esas calles», explicó el funcionario durante una conferencia de prensa y resaltó que las balas impactaron- aparte de en los cuerpos de las víctimas- en distintos departamentos situados en el primer y segundo piso del edificio.
«Se trató de un ataque dirigido hacia la torre 11 y hacia las personas que se encontraban en el lugar», indicó y remarcó que los ocupantes de los rodados «dispararon indiscriminadamente».
«Hay líneas de investigación que dan cuenta de que el hecho podría estar enmarcado en un conflicto de bandas, que podría ser una represalia por un hecho acontecido la semana anterior en Esmeralda al 3800», reconoció Saldutti, tras ser consultado por la vinculación del Clan Funes en el sangriento episodio, aunque destacó que se trata de información que es preciso constatar.
