La fiscal Valeria Haurigot que investiga la balacera de este miércoles contra el Centro Municipal de Distrito Sudoeste Emilia Bertolé, de calle Francia al 4400, aseguró que existieron desprolijidades en la preservación de la escena del hecho, fundamentalmente en cuanto a la amenaza escrita en un cartón dejada en el lugar.
«La nota no fue entregada con el resto de la evidencia que se tomó en el primer momento que llegó Criminalística. O sea que tenemos que ver qué pasó. Notamos una desprolijidad en ese sentido, en cómo se manejó la escena del hecho que realmente nos deja muy preocupados porque es un retroceso en cómo se preserva lo que después nos va a servir», sostuvo la funcionaria que habló con los periodistas desde el lugar.
En tanto, ejemplificó sobre la importancia de conservar las pruebas con el caso del atentado perpetrado contra Televisión Litoral cuando, a partir de una huella dactilar, se puedo establecer la autoría material del hecho. «Esa es la importancia de la escena, además de tomar todas las declaraciones de personas que, quizás en un primer momento, no se animan a dar su versión, pero con el transcurso de las horas sí lo hacen, cuando perciben la magnitud de lo sucedido».
«Es gravísimo lo que pasó. No teníamos personal que coordine ni que lleve adelante todas las tareas propias de una investigación criminal», apuntó la fiscal.
«Hay un error en la coordinación del manejo de la escena del hecho», insistió Haurigot, que, de todos modos, dijo no tener identificados a los responsables de los incumplimientos. «No sabemos si el cartel se dejó cuando se efectuaron los disparos o posteriormente», subrayó.
Sin embargo, destacó la «buena voluntad» de algunos efectivos de la Policía, aunque planteó que «con eso solo no alcanza, hay que respetar los protocolos de investigación».
