La Guardia Urbana Municipal clausuró este lunes el bar Temple Craft tras la caída de una garrafa a un pasillo lindero al local. El incidente generó susto y temor entre los vecinos. Viviana Ronco es una de las vecinas perjudicadas, y dialogó con el programa El Puente que se emite todas las tardes por Radio Mitre Rosario.
Viviana conto que desde febrero con un grupo de vecinos de la zona les llamaron la atención a los propietarios del bar ya que las garrafas eran subidas a la terraza con sogas mediante un sistema de poleas, ante esto decidieron hacer una notificación al municipio, pero todo quedó en suspenso.
“La preocupación es grande ya que manipulan gas envasado en altura y no hay una sola garrafa sino varias, son locales que no tienen el gas conectado”, explicó la vecina.
En ese sentido Viviana precisó que tuvieron que averiguar quién debe hacerse cargo de estas situaciones, pero se lamentó de que no lograron que alguien se haga responsable y que tengan que acontecer este tipo de hechos para que salga a la luz y quien corresponda se haga cargo.
Además, relató que los vecinos que viven pegados al bar hace meses que no pueden dormir ya que es imposible convivir cuando se tiene el baño de establecimiento pegado a la medianera o el malacate que sube y baja, sumado eso a la aglomeración de gente.
“Quiero dejar en claro que nosotros queremos convivir con ellos, porque si se cumplieran las ordenanzas sería posible hacerlo, queremos tener un barrio con actividad y vida, pero con respeto”, aclaró.
Por su parte, Germán Paniego de la vecinal Laureano Maradona, que agrupa a vecinos de Pichincha y Luis Agote, contó que el episodio ocurrió en horas de la noche. Quienes habitan la zona de Jujuy al 2200 escucharon “el ruido de la caída de una garrafa de 45 kilos desde una altura importante”.
Paniego sostuvo que el impacto pareció “una explosión” por lo que los vecinos avisaron a la Guardia Urbana Municipal (GUM) y a la policía. “Vinieron, vieron lo que pasó, se labró un acta y se clausuró el bar”, manifestó.
Consultado sobre si hay antecedentes de este tipo de sucesos en el lugar, el referente vecinal precisó: “Es el primer incidente más allá de que se sabía que tenían acopio de garrafas”.
Paniego explicó que el local “no tiene la posibilidad de trabajar con el gas natural” y que actualmente el propietario del bar “está esperando la aprobación de Litoral Gas y los tiempos son bastante lentos”.
El representante de los vecinos señaló que reconoció que mantiene contacto asiduo con la gente del bar y que “uno de los temas a resolver es el acopio de las garrafas”. Y agregó: “Son garrafas vacías, por eso dicen que no hay peligro de explosión. Las que no se usan más se pasan a acopio. Esa es la versión del bar”.
