La pelota podrá volver a rodar ahora en las canchas de fútbol 5 tras la habilitación provincial. La merma de casos y el pedido insistente del sector, seriamente afectado por la pandemia del coronavirus, fueron clave para que el Gobierno nacional de dar luz verde al retorno del deporte de contacto.
En diálogo con El Puente de Radio Mitre Rosario, Juan Ignacio Álvarez, vicepresidente de la Cámara de Canchas de Fútbol 5, valoró la medida y aseguró: «Por fin podemos ver la luz al final del camino, después de casi 9 meses. Primero estuvimos sin trabajar y luego unos meses trabajando como metegol humano».
En alguna que otra ocasión, así como ocurrió en otras actividades habilitadas, hubo cierto descontrol. Rebuscando alternativas para subsistir, algunas canchas de fútbol 5 debieron readaptarse para habilitar el «metegol humano», que consistía en justamente humanizar el tradicional juego de bares y kioscos, con personas teniendo contacto con pelota a metros de distancia. Sin embargo, hubo denuncia que en algunos complejos eso no se respetó a rajatabla y se armaron los partidos de fútbol tradicionales.
En relación a esa situación, Álvarez manifestó: «Puedo hacerme cargo, al menos en mi complejo, siempre se trató de cumplir el protocolo a rajatabla. No podés controlar a personas que tienen 30 años cada uno, vos le comentás lo que tenés que hacer pero no lo podés obligar».
El tiempo pasó y ahora sí, el fútbol 5 tradicional vuelve. «Abrí la cancha hace un mes, donde la situación era otra, había más de mil casos y hoy en día hay la mitad. La gente antes no se animaba y ahora se anima más».
«La gente dijo basta, acá se terminó, ya estuvimos mucho tiempo encerrado y es hora de salir adelante», continuó.
Por último, sobre el porqué ahora sí puede desarrollarse casi con normalidad la actividad, Álvarez: «Cambiaron los casos, pero también influyeron las aperturas en Buenos Aires. Vivimos en un país centralizado, cuando abren Buenos Aires comienzan a abrir en otras provincias».
Cuándo y cómo vuelve el fútbol 5
Nación levantó el pulgar y ahora la pelota la tiene la provincia. La expectativa del sector es alta porque las promesas de reabrir están latentes y podrían ser incluso en la semana próxima. Según se baraja, será un máximo de 10 personas que deben llegar al lugar ya cambiados y retirarse sin utilizar los vestuarios.
