15°
lunes 29 de abril del 2024

Recesión, negocios cerrados y peligro de puestos laborales: el duro relato de un empresario textil rosarino

Elías Carranza, responsable de la firma Sol Mujer pormenorizó en el crítico momento que atraviesa el sector a causa de la extensión de la cuarentena.

En un mundo convulsionado por la propagación del coronavirus y marcado por el confinamiento, la industria textil atraviesa uno de los momentos económicos más complejos de su historia. La extensión de la cuarentena obliga a los empresarios a mantener los negocios cerrados y provoca desesperación e incertidumbre por lo que vendrá. Elías Carranza, titular de la firma de indumentaria rosarina Sol Mujer relató al aire de Radio Mitre el preocupante escenario marcado por la pandemia.

“La particularidad de nuestro rubro hace que mucho antes de que comience la venta empecemos a trabajar, por lo  cual todo lo invertido en los primeros meses de verano lo perdimos porque la temporada escolar ya prácticamente está  perdida», contó el comerciante.

Por otra parte, analizó la globalidad del coronavirus. En ese sentido, remarcó: “Sabemos que es un problema que excede lo local, es un fenómeno mundial que nos supera como país y nos imposibilita pensar cuándo y cómo va a terminar porque estamos ya pensando en una situación de salud que puede llegar a extenderse” .

Durante la entrevista al aire del programa El Puente, el empresario aseguró que la “preocupación radica hoy en no poder pagar los sueldos de los empleados, ni llegar con impuestos y alquileres que aunque no se utilicen deben abonarse”, pero destacó que Sol Mujer “no despidió ni suspendió a nadie y tratarán en ese sentido de ser lo más solidarios posibles con toda la cadena productiva: tanto de proveedores como de empleados”. Sin embargo, advirtió que esa situación es compleja de sostener dada la parálisis de las ventas.

Por último, el comerciante puso en duda los beneficios económicos difundidos por el gobierno nacional para el sector de las pymes. “Hasta el momento nos están entreteniendo cargando las cuentas de nuestros empleados pero no sabemos si calificaremos para las ayudas sociales ni tampoco para las líneas de créditos bancarias”, concluyó.