Ciento treinta palestinos resultaron heridos este viernes por disparos israelíes en la Franja de Gaza, según el ministerio gazatí de Salud, en manifestaciones que reunieron a miles de personas en un clima que hace temer una nueva gran confrontación.
En este trigésimo viernes consecutivo de movilización en el enclave, que estuvo acompañada de enfrentamientos, los manifestantes se mantuvieron a distancia de la valla fronteriza en un intento de evitar una escalada, constataron periodistas de la AFP.
La tensión entre Israel y el movimiento islamista Hamas, que dirige el enclave, y sus aliados lleva semanas aumentando, lo que reaviva el temor a una escalada e incluso a una guerra en un territorio que ya vivió tres desde 2008.
Este viernes representaba una nueva prueba de la voluntad de evitar un conflicto por ambas partes.
Hace una semana, murieron siete palestinos, y el viernes anterior habían perdido la vida otros tres.
Algunos palestinos se acercaron este viernes a la valla fronteriza, quemaron neumáticos y lanzaron artefactos explosivos hacia los soldados, indicó un portavoz militar israelí.
«Los soldados respondieron con medios antimotines y balas reales, según las reglas en vigor», añadió. Pero «en general, [los palestinos] mantuvieron las distancias», confirmó.
Miembros de las fuerzas de seguridad de Hamas fueron vistos disuadiendo a los manifestantes de acercarse a la valla fronteriza, de varios metros de alto, detrás de la cual se encontraban los francotiradores israelíes, constató AFP.
Israel había señalado que estaba dispuesto a responder con contundencia en las manifestaciones de este viernes, después del disparo el miércoles de dos cohetes desde el enclave palestino hacia Israel. Uno de ellos destruyó una casa cuyos inquilinos — una madre y tres niños– se salvaron por muy poco.
La aviación israelí respondió bombardeando una veintena de objetivos militares en la Franja de Gaza.
Israel, en una aparente advertencia, posicionó decenas de tanques y vehículos blindados en el norte de la Franja de Gaza, constató un periodista de la AFP.
El emisario de la ONU para Medio Oriente, Nickolay Mladenov, llamó a israelíes y palestinos a la «calma» y a «evitar la escalada». Igualmente recordó en Twitter que Egipto y la ONU intentaban desde hace semanas impedir la escalada.
Una delegación egipcia estuvo el jueves en Gaza e instó a la dirección de Hamas a intentar que las manifestaciones del viernes no degeneraran, dijo un responsable egipcio bajo condición de anonimato.
Desde el 30 de marzo, varios miles de gazatíes se manifiestan regularmente a lo largo de la valla de seguridad, dando lugar a enfrentamientos con los soldados israelíes. En varias ocasiones, el ejército israelí y los grupos palestinos intercambiaron disparos de cohetes, obuses y misiles.
Desde entonces han muerto al menos 207 palestinos, en tanto que del lado israelí perdió la vida un soldado.
