El caso de BenjamÃn, el nene de 8 años herido por una bala perdida cuando estaba por jugar un partido de fútbol en las canchitas de Pablo VI, desnudó, una vez más, la trama de violencia urbana que envuelve a Rosario. Cristian Flores, el DT del equipo categorÃa 2011, contó que el niño habÃa sido el primero en llegar al precalentamiento cuando se desvaneció.»Lo tenÃa upa y respondÃa», expresó en declaraciones públicas, al tiempo que señaló que ni él ni los que presenciaron el episodio se imaginaron que la lesión habÃa sido provocada por un proyectil.
«Lo primero que preguntaron todos cuando se desvaneció fue si habÃa desayunado. Para todos se cayó y se cortó», reveló Flores, aún conmovido por lo que pasó. «Cuando veo que le sangra la cabeza voy y busco el botiquÃn. Lo asistimos y llamé a la ambulancia, pero no llegaba, asà que los padres decidieron llevarlo pero, supuestamente, porque se trataba de un corte en la cabeza», agregó.
El técnico aseguró que no escuchó ningún ruido que le haga pensar que se trataba de un tiro. «Yo lo tenÃa upa y el nene respondÃa, se querÃa como dormir pero respondÃa a los padres y al profe. «Después nos enteramos de la mala noticia de que habÃa sido una bala perdida», concluyó.
BenjamÃn permanece estable, aunque delicado, luego de haber sido operado dos veces por los médicos del Hospital de Niños VÃctor J. Vilela. Está en coma farmacológico y con respirador.