La política en su máxima expresión: salvar el fútbol de las garras del mercado
Opinión, por Mauro Yasprizza.
Por Mauro Yasprizza.
Mientras en Santa Fe hay temas menores como la inseguridad, la inflación y el desempleo, el diputado Germán Martínez ha identificado el verdadero problema que desvela a los ciudadanos: la posibilidad de que los clubes de fútbol se conviertan en Sociedades Anónimas Deportivas (SAD). Sí, en un acto de patriotismo legislativo, el diputado peronista y kirchnerista propone blindar la futura Constitución santafesina contra esta amenaza capitalista.
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Porque claro, en un país donde la economía se tambalea como un central sin experiencia, lo prioritario es asegurar que los clubes sigan siendo refugios de dirigentes impolutos, de esos que jamás manejaron sus instituciones como feudos personales ni llevaron las cuentas al borde del abismo. Nada de inversores extranjeros, nada de gestión profesionalizada. ¡El club es del pueblo, aunque el pueblo no pueda pagar la cuota social!
Lo curioso es que el diputado parece haber pasado por alto un pequeño detalle. ¿Podría explicarnos, Germán, qué es hoy el Club Argentino de Rosario? Porque hay quienes dicen que funciona como una SAD encubierta. Pero no, seguro es solo una “asociación civil” con amigos estratégicos, porque aquí las SAD son malas, pero los gerenciamientos disfrazados… bueno, eso ya es otro tema.
Menos mal que la política está para lo importante. Mientras el FMI, el dólar y la justicia social pueden esperar, al menos dormiremos tranquilos sabiendo que la Constitución santafesina nos protegerá de la peligrosa idea de que el fútbol se maneje con criterios empresariales. ¡Gracias, diputado, por poner las prioridades en orden!
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