El pasado viernes una joven se hizo presente a las 7 de la mañana en el Hospital Provincial del Centenario a raíz de un turno programado para que le realicen una operación de vesícula, pero por motivos que aún no quedan claros, la operación se retrasó y tuvo que esperar 18 horas para ser atendida.
En diálogo con Rosario Nuestro, Flavia Pascual, madre de la paciente, contó que su hija esperaba el llamado hace dos meses luego de realizarse los estudios correspondientes.
En tanto, la joven fue notificada el día jueves para presentarse en el hospital al día siguiente, con la indicación que desde la noche no podía ni beber ni consumir alimento y presentarse en el lugar a las 7 de la mañana.
“Nunca ingresó a internación. Pasaron las horas y a las 14, 30 horas no se sentía bien, producto de que estaba sin comer ni tomar agua, le pregunté a un hombre que estaba ahí si la iban a llamar y me contestó -creo que sí, estamos demorados-”, relató la mamá de la joven , quien también hizo su descargo a través deun posteo en su cuenta de Facebook.
Cuando se hicieron las 16horas y luego, Flavia indicó que volció a preguntar manifestando que “su hija no se sientía bien y que tiene dos hijos menores que necesitan de ella”, pero no obtuvo respuesta.
Luego de 9 horas sentadas en un banco de las instalaciones del Hospital Provincial del Centenario les comunicaron que no va a iba a ser operada.
Tras la noticia, la madre de la joven “entró en cólera” y amenazó que iba a hablar con los directivos del nosocomio. Al escucharla, varios pacientes le manifestaron que no era la primera vez que sucedía.
“Cuando yo me quejé empezó a hablar gente que ya era la segunda vez que le hacían lo mismo, sufrimos un trato inhumano, 18 horas sin tomar agua ni comer y ninguna explicación”, concluyó.
