Como cada año, la noche de los Emmy se configuró como un auténtico desfile. Las celebridades desplegaron todo su glamour en la alfombra roja del teatro Microsoft de Los Ángeles. Las taquilleras Robin Wright, Elisabteh Moss y Nicole Kidman fueron de las más elegantes.
Kidman, ganadora como mejor actriz de miniserie eligió un modelo rojo de Calvin Klein. Hiper-apretado en la cintura y semi-acampanado la ex de Tom Cruise dejó en claro que el paso del tiempo lejos de deteriorar su figura, la favorece.
Por su parte, una de las estrellas de la noche por su labor en «The Handmaid’s Tale», Elisabeth Moss, eligió el rosa, color que pisó fuerte en el invierno y que, todo indica, seguirá en la próxima temporada de verano sudamericana. En strapless y con un largo que no llegaba a los tobillos, el vestido de Moss remitía a las escenas de Mad Men en la que encarnó a la histórica Peggy, por su corte Pin-up.
Si hablamos de estilo, sin dudas Robin Wright es uno de los emblemas hollywoodenses. La protagonista de «House of Cards» se destaca en cada evento tanto por la elección de su out-fit, como por su escultural físico. Esta vez, optó por un escotadísimo atuendo negro largo hasta el piso. Quizás el peinado no fue acorde a tamaño evento. Utilizó melena suelta con flequillo. Tal vez un corregido habría acompañado mejor la indumentaria briilosa que usó para tamaña gala.
