De la sorpresa al misterio. Tras conocerse la noticia del macabro hallazgo de 30 cabezas y cuerpos de presuntos perros faenados en un contenedor de la zona oeste de la ciudad, las dudas invadieron al barrio y la intervención de fiscalía no hizo más que acrecentarlas ya que no se pudo comprobar la existencia de los animales en el lugar. La denuncia, había sido hecha por una vecina del barrio a la que también se le perdió el rastro.
“Al principio pensábamos que eran pollos. Cuando miramos bien, nos dimos cuenta que eran perros. Había cabezas sueltas en el contenedor y otras dentro de una bolsa. Estaban fileteados al ras. Lo deben haber hecho con un cuchillo. Estaban cortados prolijos. Lo hizo alguien que sabía cómo hacerlo”, contó una vecina este miércoles por la mañana en diálogo con el diario El Ciudadano y las imágenes del contenedor repleto de los cuerpos, sin piel y cortados al ras, empezaron a circular en las redes sociales.
Algunos vecinos deslizaron la posibilidad de que los integrantes de una secta sean los autores de esta monstruosidad, otros apuntaron contra un frigorífico de la zona, al que aseguran haberlo visto parar en reiteradas ocasiones a dejar desperdicios en el contenedor.
En tanto, si bien no hubo denuncia policial, el Ministerio Público de la Acusación inició una investigación de oficio el mismo día que la noticia se diera a conocer por los medios de comunicación.
Horror en zona oeste: encontraron 30 cabezas y cuerpos de perros faenados
De acuerdo a lo informado por dicha fuente judicial, personal policial se acercó a la zona oeste y revisó los containers de Santa Fe al 4900 donde aparentemente se habrían encontrado los restos de los animales. En el lugar, personal policial confirmó que no se había encontrado lo denunciado y se mandó a analizar el relleno sanitario en el lugar, que también obtuvo resultados negativos, al igual que la respuesta de bromatología sobre el aviso o muestra de algún alimento que se haya realizado con los restos de los presuntos perros y las cámaras de seguridad que tampoco pudieron confirmar movimientos raros alrededor del container.
La denuncia fue realizada en primer lugar por una vecina del barrio, a la cual también se le perdió el rastro.
Por lo tanto, “al no haber secuestro de restos no se puede corroborar por el momento que se trate de perros”, afirmaron desde fiscalía.
