Newell’s y Central se verán las caras en los cuartos de final de Copa Argentina. La Lepra dejó en el camino a Atlético Tucumán y el Canalla eliminó este miércoles a Almagro, quedando confirmado el clásico rosarino en el certamen más federal.
Mientras los organismos de seguridad tratan dilucidar bajo que condiciones se jugará el partido que desde la previa se considera de «alto riesgo», la intendenta Mónica Fein pidió que el duelo lugareño se juegue en la ciudad.
El deseo de Fein no parece algo descabellado ni tampoco imposible de llevar a cabo: hay dos antecedentes que avalan su pedido. Es que por la Copa Argentina 2013, en 16avos de final se cruzaron Atlético Tucumán y San Martín. El duelo tucumano se jugó en el Monumental José Fierro, estadio del Decano, con las mismas cantidad de entradas para ambas parcialidades. Sin embargo, aquel partido terminó con incidentes.
En el Mario Alberto Kempes, en Córdoba, 35mil personas fueron testigos del duelo de Copa Argentina entre Belgrano y Talleres. El encuentro, también correspondiente a la edición 2013, terminó favorable para la ‘T’. Y a diferencia del partido entre tucumanos, el encuentro finalizó con normalidad, sin incidentes ni enfrentamientos entre las hinchadas.
