Tras el allanamiento de este martes a la sede del Sindicato de Trabajadores Municipales en Entre Ríos al 1200 por parte de la Agencia de Investigación Criminal (AIC) con apoyo de la Tropa de Operaciones Especiales (TOE), la Justicia libró orden de captura para Alberto Morales, agente de la Guardia Urbana Municipal investigado por cohecho y tráfico de influencias, en el marco de una causa que investiga irregularidades realizadas con cooperativas de trabajo que tenían contratos con el municipio.
Entre los procedimientos que se llevaron a cabo, uno ellos fue en una vivienda de Santiago al 4000, donde esperaban encontrar a Morales, pero no sucedió, por lo que esperan dar con su paradero ya que tendría que prestar sus servicios para la GUM. Esta persona es investigada por el fiscal de la unidad de Investigación y Juicio, Enrique Paz, quien ordenó los allanamientos de este martes, que además de los mencionadas se llevaron adelante otro más en una casa en zona sur y otro en un domicilio ubicado en Funes.
Lo que tratan de determinar es si Morales realizó alguna maniobra irregular a través de cooperativas de trabajo que tienen contratos con el municipio rosarino. A su vez, lo que sí descartaron es que la Intendencia no está involucrada en lo absoluto con estas acciones. Una escucha telefónica en otra causa que no estaba relacionada pero dónde se detecta un posible tráfico de influencias, desencadenó la investigación.
El fiscal Paz de la Unidad de Investigación y Juicio por Asociación Ilícita lleva adelante esta investigación, que es por cohecho y tráfico de influencias y comenzó en abril del 2017, y la documentación que se secuestró este martes en el Sindicato de Municipales tiene que ver con libros de contabilidad y documentación que se analizará para determinar si tiene vinculación con las cooperativas.
