El avance de la tecnología se asoció durante años con la felicidad de las personas. Cuantos más y mejores dispositivos, menos tareas para el hombre. No obstante, el propio cofundador de Apple, Steve Wozniak, admitió en el Festival de las Ciencias en Moscú que la gente tiene hoy «el mismo nivel de felicidad que los prehistóricos».
A su vez, mostró preocupación respecto a la dependencia de las personas con los dispositivos: «Hubo un tiempo en el que Steve Jobs y yo soñábamos con crear un dispositivo que pudiera recuperar la vista de los ciegos. Y ahora, cuando entro al metro y veo que todo el mundo está pegado a los celulares, me doy cuenta que dejamos ciegos a los que tenían visión».
En líneas generales, contó que junto a Steve Jobs pensaban que la tecnología haría más felices a las personas porque facilitaría sus vidas, pero que con el tiempo observó que las personas no trabajaban menos sino más y que un salario ya no bastaba para mantener un hogar.
Al mismo tiempo, advirtió que la mecánica desaparecerá en unos años: «Se está convirtiendo en algo del pasado. Como ingeniero me percato de que no visitaremos ningún otro planeta. Soy realista y veo claramente qué es posible y lo que no».
«Con los smartphones, dejamos ciegos a los que tenían visión».
Entre otros temas, Wozniak habló de la inteligencia artificial y aseveró que no reemplazará a la humana. «La inteligencia artificial espera una orden para decidir cómo debe resolver cierto problema. Mientras que el cerebro ya sabe cómo hay que actuar. Por desgracia, ahora no tenemos ni idea de cómo funciona nuestro cerebro. Además, el cerebro es económicamente muy rentable», señaló.
