No hay duda que la iniciativa de modificar la ordenanza municipal que regula la cantidad de personas que pueden ingresar por habitación en los moteles, o albergues transitorios, presentado por las concejalas Eugenia Schmuck (UCR) y Fernanda Gigliani (Iniciativa Popular), es controversial y algunos lo podrán considerar de poco importancia. Sin embargo, dos sectores claros lo ven como una necesidad.
Desde la Cámara rosarina de Moteles, aseguran que el 90% de las consultas son para preguntar si se puede ingresar con más de dos personas y son varios los usuarios que confiesan haber tenido que entrar escondidos.
Los moteles se reestructuran para dar servicios de mayor calidad
Hasta ahora, el texto limita el ingreso sólo a dos personas por habitación. En este sentido, Gigliani dialogó con Radio Mitre Rosario y afirmó “que en lo que va del año ha caído la actividad” y manifestó que “tiene que ver con un cambio de costumbre de la sociedad”.
La restricción que tiene la ordenanza rige desde los años 70 y en 1997 tuvo que cambiar a partir de que una pareja gay intentó entrar en un motel y fue discriminada.
“Desde lo simbólico me parece interesante el debate porque sacar esa restricción es reconocer que existe otro que tiene gustos particulares, que tiene prácticas sexuales diferentes a la que podemos tener otros, pero que merece ser reconocida y respetada esa libertad”, expresó la edila al respecto.
Y afirmó: “Hoy más de una persona tiene estas prácticas sexuales e ingresan a los hoteles en los baúles de los autos o agachados, escondidos”.
Por su parte, desde la Cámara de Moteles reafirmaron la alta demanda en la ciudad y el interés de los usuarios por cambiar la rutina.