El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, se hizo presente hoy en Houston, una de las ciudades perjudicas por el huracán Harvey. El mandatario repartió comida y hasta abrazos a los damnificados, y no dudó en destacar la respuesta que su gobierno brindó ante una de las peores inundaciones del territorio estadounidense.
“Realmente creo que la gente aprecia lo que se hizo. Se accionó de manera muy eficiente, muy bien, y eso es lo que queremos”, detalló Trump durante su visita a la localidad más poblada del estado de Texas, que todavía sufre las consecuencias de la inundación.
Además, el gobernante norteamericano comentó que las familias con niños con las que mantuvo un dialogó en el centro de la ciudad, “estaban contentos” y que pudo observar “mucha felicidad” y “mucho amor”, he insistió que esto fue debido a que la respuesta al desastre ha sido “algo maravilloso”.