Una señora sufrió el robo de una cartera mientras vacacionaba en Carlos Paz. En su interior tenía, entre otras pertenencias, 6 entradas para ver el espectáculo de Pedro Alfonso, La isla encantada. El fin de semana, los ladrones quisieron entrar a ver la obra en el teatro Del Lago de la ciudad cordobesa como si hubiesen sido ellos los dueños de los tickets. Sin embargo, no pudieron concretar sus asistencia porque los descubrieron en el ingreso.
Precavida, la mujer en cuestión realizó la denuncia del hurto inmediatamente después. Pero además informó al personal de sala lo sucedido. Como sus datos quedaron registrados en el sistema, pudo recurrir al show sin incovenientes. Un rato después de haber entrado con su familia, seis personas se hicieron presente en el lugar con las 6 entradas de papel en mano.
Acto seguido, empleados del teatro irrumpieron en el recinto donde la damnificada ya estaba acomodada en su butaca; le comentaron lo ocurrido y le preguntaron si tenía intención de realizar una nueva denuncia. No obstante, optó por la negativa y prefirió quedarse a ver la obra.
