El 7 de abril prometía ser una fiesta para los fanáticos de Viejas Locas. Pero, lejos de la celebración, el show que marcaría el regreso de la banda a los escenarios no sólo no se realizó sino que terminó en un caos. El líder de la banda, Pity Álvarez, tardó alrededor de siete horas en aparecer y la ira del público se tradujo en disturbios. Días después, Lucas Salinas, productor del espectáculo informó que no devolverían el monto de las entradas en tanto responsabilizó al músico. Ahora, el propio Pity decidió romper el silencio y contó por primera vez de lo sucedido.
En una carta que difundió a través de la agencia Télam confesó que estuvo deprimido y encerrado y apuntó contra los promotores de la apuesta: «Al regresar de Tucumán no tuve dudas que fui estafado, usado y engañado. Estuve varios días en la cama sin ganas de salir, escuchar ni ver a nadie; con una angustia, impotencia, depresión, no sé, un sentimiento que no puedo explicar con palabras».
Pity Álvarez tardó siete horas en salir a cantar y el público prendió fuego el escenario
Además explicó que pudo recuperarse y se defendió de las acusaciones que sobre él recayeron apelando a su ingenuidad. «Me llevó este tiempo poder salir de esto y ahora que estoy mejor, quiero decir que si en alguna forma soy culpable, fue por ser tan ingenuo y confiar tanto en las personas».
Los incidentes en el club Argentino del Norte de San Miguel de Tucumán llegaron a agresiones físicas a los integrantes de la banda y a la quema del escenario. Entretanto, Pity no hizo referencia a la devolución del costo de los tikets.
