Las organizaciones que nuclean a peones y titulares de taxistas solicitan “la clausura y caducidad de Cabify” en Rosario. En este marco, buscan respuestas de la Municipalidad para que establezca “reglas claras” en dicho sistemas de transporte. Por este motivo, este miércoles a partir de las 9:00 se concentraron en el Parque Independencia para marchar hacia el Concejo.
El tesorero de la Cámara de Titulares de Licencias de Taxis de Rosario (Catiltar), José Iantosca, dialogó con este medio sobre la movilización. De acuerdo detalló, el plan de lucha es organizado contra las nuevas aplicaciones que ofrecen servicio de transporte “desde que empezaron nuevamente a hacer propaganda invasiva, invitando a clientes y anotando conductores, para venir y meterse en la ciudad”.
No obstante, agregó que desde las organizaciones que los nuclean estallaron cuando la plataforma Cabify absorbió Easy Taxi y empezó a ofrecer ambas prestaciones. “Ponen los precios que ellos quieren, es decir, desregularizan el sistema y violan todas las normas de servicios públicos”, reclamó Iantosca. En este sentido, detalló que la tarifa de un remis debe costar un 25 por ciento más cara y no debe ser cobrada por aplicación, sino por reloj.
“A partir de que nosotros saltamos, ellos lo cambiaron y hoy están cobrando casi con paridad lo que es un remis y un taxi”, destacó el tesorero sobre la reacción de Cabify ante su reclamo. Por otra parte, señaló que esta aplicación viola la norma que indica que “no puede existir una empresa de remis y taxis en el mismo lugar y al mismo tiempo”. De este modo, agregó que deben ser firmas distintas, con números de teléfono y aplicaciones diferentes.
Antes de culminar, insistió sobre Easy Taxi, ahora perteneciente a Cabify: “Hace cinco años venimos diciendo que estas aplicaciones son piratas, vienen por el 30 por ciento de nuestra recaudación. Nos involucraron para quedarse con el sistema de transporte de la ciudad”. Por este motivo, resaltó la importancia de utilizar Movi Taxi, la aplicación autorizada por la Municipalidad que “tiene todas las comodidades que se necesitan tecnológicamente para competir”.
El representante de Catiltar finalizó diciendo que esperan que la Municipalidad multe a “todos aquellos particulares que se quieran anotar en Cabify”, es decir, que se considere como un “transporte ilegal” y cueste “más de 100.000 pesos poder salir de esta situación”. “Espero que pongan las reglas caras ahora, demostrando un apoyo fuerte del Estado hacia el sistema de trasporte actual. Si no cuando estas empresas salgan con todas sus fuerzas, se va armar una guerra y va a ser tarde».
