En la mañana de este martes se abrió una nueva polémica de las tantas que se generaron desde el inicio de la pandemia. Como medida frente al aumento de contagios en las últimas semanas, la Municipalidad de Rosario decidió sacar los arcos de fútbol de plazas y parques públicos para evitar que se armen partidos, actividad que hasta el momento no está permitida. La medida se tomó en base a la dificultad de controlar los encuentros que se realizaban por fuera de los protocolos sanitarios.
Un grupo de jóvenes que fueron los encargados de colocar y armar los arcos con dinero de su propio bolsillo en un sector que se encuentra enfrente del río Paraná, se vieron molestos por la decisión de las autoridades locales.
«Nosotros siempre íbamos a jugar en la zona de Alvear y el río, nosotros compramos esos arcos, los pintamos y hoy a la mañana nos desayunamos con que ya no estaban más. No puedo confirmar si los tienen la secretearía de Control o la GUM», explicó Augusto en El Puente por Radio Mitre Rosario, vecino que fue uno de los que llevó a cabo la colocación de los arcos en el predio que se encuentra en Alvear y el río.
En ese sentido, el joven explicó que hacía desde el inicio de la pandemia que el terreno no se usaba para jugar: «Nosotros ya hace 5 meses que no volvimos a jugar, nadie nos comunicó esta decisión de sacarlos. En el lugar siempre acudíamos más de 20 personas para jugar. Hace más de 18 años que venimos jugando ahí, nosotros cortamos el pasto porque antes era un terreno abandonado»
Y concluyó: «Esos arcos a nosotros nos costó mucho desde lo económico e hicimos un fondo para comprarlos, estaban fijados con candados. Queremos que nos den una respuesta para saber si los vamos a poder recuperar».
