El cielo luce amenazante en la ciudad, en una jornada que pareció más primaveral que invernal. El termómetro superó los 20 grados durante gran parte del día y el Servicio Meteorológico Nacional prevé tormentas aisladas para la noche del domingo y madrugada del lunes.
Según vaticinios de la entidad, se esperan ráfagas que superen con facilidad los 55 kilómetros por hora y algunos rayos castigando a Rosario. Cerca de las 17 la humedad rozó el 80 por ciento, con una visibilidad reducida a 9 kilómetros y una temperatura superior a los 23 grados.
El lunes mejoraría la situación y si bien el cielo se verá cubierto, no se esperan lluvias. La máxima esperada es de 14 grados mientras que la mínima de 8. El martes tendría condiciones climáticas similares, con ausencia de precipitaciones.