El ex jefe de Drogas de la Policía, Alejandro Druetta, fue condenado este jueves a 10 años de cárcel por tráfico de estupefacientes. Hernán Lascano, periodista especializado en temas policiales y autor del libro Los Monos, repasó la investigación que culminó en la sentencia a Druetta y los vínculos con el ex ministro de Seguridad Maximiliano Pullaro.
A raíz de las explosivas declaraciones del actual ministro de Seguridad, Marcelo Sain, que vinculó a Druetta con Pullaro y el senador Lisando Enrico, el periodista explicó sobre los audios que circularon en las audiencias hasta llegar al juicio final.
«Se pasaron escuchas del año 2012, donde Druetta dialogaba con Pullaro cuando era un dirigente territorial en General López y también con Lisandro Enrico. Lo que había era una situación donde queda muy claro que tanto Enrico como Pullaro tenían una actitud muy favorable hacia Druetta, cuyo costado de tener vinculaciones con jefes narcos no se conocía», consideró.
A modo cronología de la relación entre los tres, el escritor contó: «Pullaro y Enrico estaban complacidos porque Druetta había activado la detención de dos importantes narcotraficantes de la zona y constituían el discurso político de ambos».
«Pullaro y Enrico sostenían a ese policía que había avanzado contra esos dos narcotraficantes. Sí tienen que explicar por qué intervenían con sus acciones de poner y sacar policías, pero no implica que protegían a un policía narco», puntualizó.
Asimismo, concluyó: «La política se mete en graves problemas cuando lanzan recriminaciones que no pueden ser sostenidas en pruebas, sí se puede exigirle a los funcionarios que expliquen cuál era su relación con Druetta, pero no desde el lado de proteger a un policía narco, porque eso no puede ser probado por lo menos hasta ahora».
La investigación
Druetta fue sentenciado por ser hallado culpable del delito de tráfico de estupefacientes bajo la modalidad de comercio, doblemente agravado por haberse cometido mediante la concurrencia de tres o más personas en forma organizada y por su condición de funcionario público. El ex jefe Policial llegó al juicio bajo la modalidad de prisión domiciliaria porque tenía bajo su cuidado a un menor con discapacidad.
«El comisario Druetta siempre tuvo un alto perfil, tuvo una alta visibilidad en relación a procedimientos que tenían que ver con actores del mundo del Ampa relevantes», explicó Lascano. Y agregó: «Lo de hoy es una situación que viene a coronar algo muchísima veces dicho, y que era sospechado, que es el accionar y procedimiento opaco de quienes tienen que controlar las cuestiones ligadas al narcotráfico y narcomenudeo y que terminan teniendo vínculos delictivos con esos delitos que tienen que controlar».
En diálogo con el programa El Puente de Radio Mitre Rosario, detalló que también a Druetta se lo halló culpable de un vínculo delictivo con un narco también condenado este jueves, Ignacio “Ojito” Actis Caporale: «Algo que le adjudicaron en este juicio, es haber dado órdenes a una persona que es un actor relevante en el narcomenudeo».
«Druetta conoce a caporale el 5 de julio de 2017, lo que se establece allí es que Druetta le hace una especie de propuesta para zafarlo de una situación a cambio de que trabaje para él. Lo que en definitiva se termina planteando es haberle dado órdenes para hacer negocios con drogas y recibir información de competidores para deterlos a fin de subir su carrera policial», añadió el periodista.
Lascano cuestionó el accionar de la justicia federal, que hoy condena al ex jefe Policial: «Esta condena muestra el proceder legal y delictivo, un funcionario que tenía que controlar el narcotráfico y termina haciendo negocios. Durante muchísimo tiempo, en la misma justicia federal que hoy lo condena, se han planteando que los procedimientos de Druetta eran ilegítimos porque no tenían un origen detectable».
Y añadió: «Creo que lo que lo viene a poner de manifiesto esta condeno a Druetta, es un reprochable modo de accionar de la Justicia Federal de Rosario, la misma que hoy condena a este tipo de prácticas, que mucha veces sirvieron para condenar a personas acusadas ilegítimamente, por más que estuvieran vinculadas en el narcotráfico».
