Los salones de fiestas reabrirán este fin de semana utilizando el protocolo de bares. Desde el sector indicaron que «esto no salva a nadie» y que es «solo un paliativo» frente a los ocho meses que estuvieron sin poder trabajar, lo cual generó una fuerte crisis económica en medio de la pandemia.
Al respecto de los detalles sobre esta habilitación para el rubro, Ariana Montero, vocera de los salones de fiestas, remarcó: «Que podamos trabajar con el protocolo de bar, no significa que somos un bar, significa que podemos hacer reuniones con ese protocolo. Eso implica que yo puedo reprogramar un evento, una reunión, con las restricciones que ya sabemos, no pista de baile, no niños, no juego de niños, y respetar el 30 por ciento de la capacidad en el interior y el 100 por 100 de la capacidad en el exterior, los que tenemos espacios al aire libre, con la distancia de metro y metro entre mesa y mesa, entre livings y livings”.
Con respecto a la posibilidad de poder aprovechar la época de mayor cantidad de eventos, dijo: “Los clientes que ya tenemos, que hacen reuniones de despedidas de fin de año, reuniones empresariales, algunas presentaciones, eso también lo podemos hacer”.
“Es polémico porque en aquel momento no estaban bien claras las explicaciones, éramos muy pocos los que habíamos sacado esa habilitación, lleva un trámite que tiene que ver con una inspección municipal, otra del Instituto del Alimento. En principio no todos la tenían y en segundo lugar, muchos no querían hacerla ni quieran o porque tienen un espacio chico o no les es redituable, porque esto no salva nadie. Es solo un paliativo que no salva los ocho meses sin trabajar”, finalizó Montero.
