Por Emanuel Rodríguez 

El robo de celulares es una problemática de la cual los rosarinos no están exentos. A gran parte de la población le tocó sufrir esa experiencia o tiene un conocido que la haya atravesado. Mientras el ciudadano camina con su teléfono en la mano o manteniendo una conversación, es cuando los delincuentes aprovechan la situación para sustraerlo. Las modalidades son varias: en motos por las esquinas, en otros casos directamente llevándoselos de los bolsos, o muchas veces a punta de pistola para que sean entregados sin resistencia.

Estos robos se repiten y se profundizan cada vez más en nuestro país, donde se calcula que en 2019, previo a la pandemia, se robaban unos 6.000 celulares por día. El Enacom (Ente Nacional de Comunicaciones), señaló que ese mismo año se denunció un promedio de 166 móviles robados cada hora, y sabemos que gran parte de estos delitos no terminan en denuncia.

Entendemos que las principales recomendaciones para evitar estos delitos apuntan al cuidado extremo de la utilización de los móviles en la vía publica y maximizar la atención, pero también no cuesta racionalizar que los celulares fueron creados precisamente para esas situaciones, y su lógica implica la conexión con el mundo en todo momento.

En ese sentido, una vez que sufrimos el robo, surgen muchas preguntas: ¿qué debemos hacer? ¿Qué herramientas no brinda la tecnología para protegernos? ¿porqué es tan importante la denuncia al *910? ¿Qué pasa con las cuentas bancarias u otras informaciones delicadas que tenemos en el dispositivo? ¿Se pueden recuperan las fotos? Rosario Nuestro en una de sus “Charlas con distanciamiento social”, consultó a Juan Pablo Calandría, especialista de tecnología de Radio Mitre Rosario, y estas son las recomendaciones:

Imágenes y edición: Franco Masellis