El Gobierno británico convocó a una reunión de crisis este lunes luego de que Francia cerrara sus fronteras a los arribos desde el Reino Unido para impedir la llegada de una nueva cepa de coronavirus que circula por Londres y el sudeste de Inglaterra.

Además, Canadá, India, Hong Kong y Polonia se sumaron a una larga lista de países, la mayoría de ellos europeos aunque también Argentina, en América, o Israel, en Medio Oriente, que prohibieron los vuelos desde y hacia el Reino Unido por la nueva cepa.

Suiza, por su parte, impuso una cuarentena retroactiva de diez días para los llegados del Reino Unido y Sudáfrica, donde también se informó de una nueva cepa de coronavirus, desde el 14 de diciembre, prohibió la entrada de cualquier extranjero procedente de esos países y los viajes turísticos a ambos destinos.

El primer ministro británico, Boris Johnson, presidirá la reunión del comité de emergencia del Gobierno en medio de advertencias sobre «importantes perturbaciones» en los puertos del Canal de la Mancha, con enormes embotellamientos que se extendían por el condado de Kent, en el sureste de Inglaterra.

Los embotellamientos comenzaron luego de que Francia anunciara anoche que cerraba sus fronteras durante 48 horas, lo que significa que los miles y miles de camiones no pueden cruzar el Canal de la Mancha en los cientos de barcos que lo navegan todos los días de un lado a otro.

Una gran parte de los productos que importan los británicos llega desde Francia.

Supermercados y autoridades aseguraron que hay reservas para días, pero se temía que los consumidores se lanzasen a hacer acopio de provisiones, víctimas del pánico, a cuatro días de unas fiestas navideñas que en lugares como Londres se vieron mutiladas por el surgimiento de esta nueva cepa del virus.

Las mercaderías que llegaban por barco en contenedores no se estaban viendo afectadas.

El Gobierno británico pidió a la población que evite los viajes a Kent, donde quedan muchos de los puertos desde los cuales se cruza el canal, informó la cadena BBC.

Por uno de ellos, Dover, pasan a diarios unos 10.000 camiones, que transportan alrededor del 20% de todas las mercaderías que llegan al Reino Unido.

El Eurotúnel, el túnel ferroviario que conecta el Reino Unido con el resto de Europa a través del canal, también suspendió sus servicios.

El último domingo, más de una decena de países europeos, además de Argentina e Israel, prohibieron los vuelos desde y hacia el Reino Unido, y hoy se sumaron Hong Kong, Canadá, India y Polonia.

La decisión llegó luego del anuncio del sábado de Johnson de que Londres y el sureste de Inglaterra iban a ser puestos bajo las restricciones más estrictas de las que rigen en el país luego de que los científicos que asesoran a su Gobierno advirtieran que la nueva variante del virus se transmitía mucho más rápido que las cepas conocidas hasta ahora.

Aunque no parece más letal que las anteriores, esta variante es hasta un 70% más contagiosa, afirmó durante el fin de semana el ministro de Sanidad británico, Matt Hancock, reconociendo que su propagación estaba «fuera de control».

El domingo último, el Reino Unido informó un récord diario de 35.928 nuevas infecciones.

El Centro Europeo para el Control y Prevención de Enfermedades dijo en una «evaluación de la amenaza» que los análisis preliminares hechos en el Reino Unido indican que la nueva cepa es «significativamente más transmisible» pero que no hay indicios de que las infecciones que provoca sean más severas.

El organismo con sede en la ciudad sueca de Estocolmo dijo que casos de la nueva variante ya han sido reportados en Islandia, Dinamarca y Países Bajos y citó informes de prensa que también hablan de contagios en Bélgica e Italia, pero no los confirmó.