El diputado Nicolás Mayoraz, presidente del bloque Vida y Familia, presentó un proyecto de ley hace varios meses que busca prohibir el uso de celulares “para todo el mundo” en cárceles de la provincia de Santa Fe. El legislador manifestó que un gran número de hechos delictivos, como extorciones, balaceras o asesinatos, son ordenados desde los penales.
“La responsabilidad es de la Legislatura”, dijo el diputado, quien afirmó que el proyecto fue presentado hace varios meses. En ese sentido, Mayoraz apuntó a que no ha tenido avances en la comisión de Derecho y Garantías.
En diálogo con el móvil de El Puente (Radio Mitre Rosario), el diputado aclaró que las autoridades penitenciarias de Santa Fe apoyaron la iniciativa “para prohibir el uso de celulares pero en forma completa” en los penales.
Y aclaró que es de forma completa “porque si solamente establecés la prohibición para ciertos reclusos, para los de alto perfil, los celulares siguen ingresando y se cotizan muy altos. Es imposible controlar celulares si la mitad del penal puede tener celulares y la otra mitad no”.
Si bien el diputado comentó que ya hay disposiciones internas que prohíben el uso de celulares, una ley tendría más impacto. En la misma línea, señaló que se dificulta el control de estos dispositivos dentro de las cárceles: “Un guardiacárcel tiene mucha presión ahí adentro, tiene miedo, tiene familia. Nos contaban que del último examen de ingreso que se hizo para cubrir 200 cargos en Piñero, se presentaron 7 nada más. La gente tiene miedo de ir a trabajar a Piñero. Entonces tiene que haber una norma de arriba que prohíba todo esto”, aseveró.
“La responsabilidad es de la Legislatura que tiene que aprobar esto y es la comisión que tiene parado este proyecto, que me dijeron que lo iban a tratar dentro de unas semanas. Y me invitaron a la comisión de Derechos y Garantías para explicar el proyecto”, agregó Mayoraz.
En tanto, el diputado se refirió a la denuncia del diputado Juan Cruz Cándido, quien afirmó que hay reclusos de Piñero que piden comida por delivery. “Rechazan la comida que les da el penal manifestando temor a ser envenenados. Entonces cuando pueden tener visitas se hacen traer la comida por delivery. La verdad que es un verdadero escándalo, una locura”, opinó.
Por último, citó a la fiscal de la Unidad Especial de Balaceras de Rosario, Valeria Haurigot: “La fiscal dijo que el 80% de las balaceras sale de ahí (cárceles), cuando secuestran celulares encuentran en las conversaciones que de ahí se organizan balaceras, aprietes, asesinatos, secuestros, defraudaciones; que más podemos esperar”.
