Un móvil de Gendarmería irrumpió hoy en la Siberia durante una clase abierta sobre la desaparición de Santiago Maldonado. Los decanos de distintas facultades expresaron su preocupación y le enviaron un comunicado a Héctor Floriani, rector de la Universidad Nacional de Rosario. La UNR, por su parte, emitió un comunicado expresando su repudio a «cualquier intento de amedrentamiento por parte de la fuerza pública a los miembros de nuestra comunidad, la cual goza del pleno derecho de expresar públicamente sus opiniones en el marco de las garantías que brinda el Estado de Derecho».
Los testimonios ya están circulando en las redes sociales y todos coinciden: la camioneta de Gendarmería, patente AB 140 DO, recorrió las calles internas de la Ciudad Universitaria de Rosario a paso de hombre. El vehículo llevaba pegado un cartel que pedía por la aparición con vida de Maldonado. Los uniformados aseguraron que habían llegado para entregar una citación a un docente, sin embargo, cuando se les requirió que muestren esos documentos, se negaron.
Tal como indica el comunicado firmado por los decanos de la UNR, la situación provocó «sorpresa y preocupación», especialmente porque se suma a una intervención similar en el Instituto Olga Cossettini y a las amenazas recibidas por la Facultas de Psicología durante la visita de Sergio Maldonado, hermano del joven desaparecido, y la Madre de Plaza de Mayo Nora Cortiñas.
Comunicado de la UNR
«En razón de los hechos que tuvieron lugar en el día de hoy, martes 3 de octubre de 2017, en el predio del Centro Universitario Rosario, mientras se celebraba un acto al cumplirse dos meses de la desaparición de Santiago Maldonado, el Rector de la Universidad Nacional de Rosario hace saber que el ingreso de Gendarmería al predio universitario no contó con el aval ni la autorización de ninguna autoridad judicial ni universitaria, tal como lo exige el artículo 31 de la Ley de Educación Superior Nro. 24.521.
Es por ello que el Rector ha instruido a Asesoría Jurídica de la Universidad para que presente de inmediato la denuncia de lo sucedido ante la Fiscalía Federal de turno.
La Universidad Nacional de Rosario repudia de manera enfática cualquier intento de amedrentamiento por parte de la fuerza pública a los miembros de nuestra comunidad, la cual goza del pleno derecho de expresar públicamente sus opiniones en el marco de las garantías que brinda el Estado de Derecho.
Rosario, 3 de octubre de 2017»