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viernes 26 de abril del 2024

Polémica revelación: “Maradona se golpeó la cabeza días antes de morir y nadie llamó a una clínica”

Lo aseguró el abogado de una de las enfermeras que atendió al 10. "Maradona podía haberse alojado en la clínica más lujosa del mundo y estaba en un lugar inhabilitado", señaló.

Cada detalle que trasciende sobre cómo fueron los últimos días en vida de Diego Maradona, suma más polémica. En este caso, el abogado de una de las enfermeras que lo atendió, reveló: «Se golpeó la cabeza días antes de morir y nadie llamó a una clínica». Además, cuestionó que se haya quedado en la casa del Tigre tras ser dado de alta: «Podía haberse alojado en la clínica más lujosa del mundo y estaba en un lugar inhabilitado». 

Rodolfo Baqué, abogado de la enfermera Dahiana Madrid, defendió que su cliente mintiera en el informe de la Fiscalía sobre las causas del fallecimiento: «Dijo que el paciente, Maradona, se negó a ser revisado por ella. Pero no fue así exactamente, sino que en ningún día salvo el primero pudo darle la medicación. Es decir, no tenía acceso directo para tratarlo, pero no ese día, sino siempre».

«No había responsables. La que le deba la medicación era la psiquiatra, pero no había un médico clínico. La que manejaba todo era la psiquiatra. Mi cliente (la enfermera) empezó a trabajar con Diego sólo diez días antes. Desde el principio comentó que se quedaba encerrado en su habitación. Nunca más salvo el primer día pudo atender personalmente a Maradona, eran los psiquiatras los que le atendían. Maradona a ella no la recibía. Así que mi cliente le daba la medicación a la psiquiatra o a los familiares y ellos se la daban. La enfermera, que era la que debía medicar a Maradona, se quedaba fuera de la habitación», agregó el letrado.

Baqué sorprendió al hacer referencia a un episodio que puede desnudar aún más la supuesta falta de cuidados correctos para Diego: «Unos días antes de morir, Maradona se cayó y se pegó en la cabeza. No fue mayor el golpe, pero se dio en el lado derecho, el contrario al de la operación. Enseguida fue levantado. Nadie llamó a una clínica, quizá por decisión de Maradona. Pero él no estaba en disposición de decidir eso. Se pasaba tres días encerrado en su habitación, sin ni siquiera ver la televisión».

Tenía 109 pulsaciones por minuto, cuando todos sabemos que un paciente coronario no puede pasar de los 80 de frecuencia cardiaca. Maradona podía haberse alojado en la clínica más lujosa del mundo y estaba en un lugar inhabilitado. De no haber estado allí, hoy probablemente no estaría muerto», finalizó.