El Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires pidió a la Justicia autorización para el uso de las pistolas Taser, mediante un “amparo por mora” para destrabar la importación de las mismas y utilizarlas por parte de la Policía.
Al respecto, Marcelo D’Alessandro, ministro de Justicia y Seguridad de CABA, expresó, al aire del programa El Puente, que se emite por Radio Mitre Rosario: “Lamentablemente es una historia que viene de hace mucho tiempo, y tenemos que recurrir una vez más a la Justicia para que dirima un capricho político por parte del gobierno nacional”.
“Para poner en contexto -continuó el funcionario-, en el país tenemos un organismo, el ANMAC que es viejo RENAR, que es aquel que registra todo el armamento y las armas que se compran, y así sea una provincia o una ciudad autónoma tiene que solicitar el permiso primero para compararlas y después para ingresarlas al país y queden registradas. Nosotros estamos de acuerdo, el problema está cuando se desnaturaliza esto, como lo hace el gobierno nacional”.
Asimismo, D’Alessandro recordó que “hace dos años solicitamos el permiso para comprar estas armas, que son de baja letalidad y se utilizan en 198 países del mundo. Son armas del Siglo XXI que salvan vidas, ya que ante diferentes alteraciones mentales o bajo los efectos de la droga, hoy los policías solamente cuentan con su cuerpo o el arma de fuego”.
Y destacó que “estas herramientas tecnológicas permiten controlar esta situación, por eso solicitamos el permiso, y el funcionario del ANMAC que nos autorizó a la semana el gobierno nacional lo echó. Nosotros participamos del proceso licitatorio, compramos las armas y cuando llegó el momento de ingresarlas no recibimos la autorización”.
“Hace más de un año que tenemos silencio, agotamos la vía administrativa y lo que hicimos fue presentar un amparo por mora y estamos a la espera que la justicia resuelva esta situación y obligue al ANMAC a resolver esto”, señaló sobre la presentación judicial.
Respecto a los argumentos del rechazo, D’Alessandro aseguró que “no hay, solamente silencio por parte del organismo. Por parte del gobierno nacional lo llevan a una discusión ideológica, y comparan estas armas de baja letalidad con las picanas y con las torturas que se realizaron en la época más oscura de nuestro país, cosa que es totalmente ridículo. Por poner como ejemplo una situación en un subte acá en Buenos Aires, el policía solamente tiene para utilizar un arma de fuego, sería una catástrofe”.
Seguido, el funcionario sostuvo: “No pretendemos darles a todos los policías de la ciudad una Taser, sino tener brigadas especiales que ante un llamado al 911 sobre una persona con alteraciones mentales alteradas o bajo los efectos de las drogas amenazando con dañar a terceros o autolesionarse, pueda actuar. Sino lo único que dejás es el arma de fuego”.
“Cuando desenfundas una Taser se activa una cámara, está controlada la descarga que se da, solamente para controlar la situación, no tiene la capacidad de generar tortura a nadie, eso es mentira”, concluyó el ministro de Justicia y Seguridad de CABA.
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