En Neuquén se instaló la polémica en las redes sociales. La semana pasada, un niño llegó a su casa con las uñas pintadas. El menor había asistido a una jornada de peluquería entre los alumnos del Jardín de Infantes Nº 18 de la localidad de Plottier. Sus padres expresaron el descontento y argumentaron que estaban jugando con la educación sexual del niño.
Laura Costa, vicedirectora del jardín, explicó que el niño tenía las uñas pintadas porque habían jugado a la peluquería durante la clase. Además, la autoridad de la institución argumentó que entre los elementos utilizados había unos viejos esmaltes y el niño quiso pintarse como el increíble Hulk. Hubo padres que se presentaron en las instalaciones del jardín para pedir explicaciones.
Fue tanta la repercusión por el hecho, que la Asociación de Trabajadores de la Educación de Neuquén (ATEN), seccional Plottier, emitió un comunicado: «Ante cuestionamientos, agravios y difamaciones por parte de integrantes de la iglesia evangélica en las redes sociales hacia docentes de instituciones educativas de la ciudad, ratifica su posición en defensa de la educación pública, laica y científica y la plena vigencia de la Ley de Educación Sexual Integral en todos los niveles y modalidades».
Durante el fin de semana, anoticiados por lo ocurrido, cientos de usuarios intercambiaron opiniones en las redes sociales y debatieron sobre la aplicación o no de la Educación Sexual Infantil (ESI) en las escuelas.
