Una verdadera bomba deportiva explotó en las últimas horas: Zlatan Ibrahimovic podría jugar en Boca en 2020. La información la brindó el periodista de TN Leonardo Paradizo, quien asegura que el crack sueco ya le comunicó a su representante que quiere vivir la pasión del fútbol argentino y lo económico no le representaría un inconveniente.
El delantero nacido en Malmo, que el próximo 3 de octubre cumplirá 38 años, juega desde el 2018 en Los Ángeles Galaxy de Estados Unidos, donde es dirigido por el ex técnico xeneize Guillermo Barros Schelotto y comparte dupla de ataque con Cristian Pavón, llegado a la MLS en este mercado de pases. Como dato extra, recientemente habría rechazado una oferta de Qatar porque su deseo sería sumarse al club de la Ribera.
Al parecer, Daniele De Rossi (recientemente convocado a la selección de Italia en lo que sería su regreso tras su alejamiento en noviembre de 2017) habría abierto una puerta importante para que otras figuras realcen la Superliga y el excéntrico Zlatan podría seguir sus pasos cuando se reabra el mercado a fines de diciembre. Por si acaso, ni lerdos ni perezosos tanto el presidente, Daniel Angelici, como el director deportivo, Nicolás Burdisso, tomaron nota e iniciaron los contactos.
Ibrahimovic comenzó su carrera en el Malmo FC de su país, para luego vestir camisetas de varios de los clubes más poderosos de Europa: Ajax, Juventus, Inter, Barcelona, Milan, Paris Saint-Germain y Manchester United. ¿Habrá que sumar a Boca a su currículum?
Ya se puso la de Central
En 2015 cuando el sueco jugaba en PSG, a través de quien era su compañero, Ezequiel Lavezzi, el club de Arroyito le hizo llegar una camiseta con la 10 en la espalda y su apellido por debajo. La foto en el vestuario del conjunto francés se viralizó aunque claro que apenas quedó en ello, un regalo para el crack que disputó los Mundales de Corea-Japón 2002 y Alemania 2006.
