El hecho ocurrió en la localidad de Oberá, en Misiones. Una chica de 17 años intervino en un grupo del servicio de mensajería telefónica llamado «Quién da más Oberá».

La joven escribió el mensaje: «Si alguien sabe, quien desease de corazón adoptar a un bebé recién nacido, que se comunique a mi número. Gracias».
De manera inmediata, la chica empezó a recibir mensajes incrédulos del resto de participantes en el grupo.

Ante los cuestionamientos, la protagonista de la historia respondió con un audio claro: «Mirá, si me escribís para adoptar el bebé, voy a leer tus mensajes, pero si me escribís para que no dé, bla bla bla, yo lo ignoro esos mensajes. En primer lugar, vos no sabés por lo que yo pasé y cómo esa criatura vino al mundo. Así que no te ponés ni en un pedacito, en una esquina de una uña de mi lugar«, sentenció.

Luego, la chica decidió avanzar con el «interés» de un participante y le ofreció los pasos a seguir en el proceso: «Si tu hermana va a querer el bebé, que se comunique conmigo. Así yo me comunico con la jueza que me está ayudando y mi abogada. Así la hacemos bien (…) Esto es todo con la Justicia, no es un juguete dar en adopción, pero yo lo doy porque tengo mis razones».