Tras la quema incesante de pastizales en las islas, el gobierno nacional declaró emergencia ambiental y zona crítica de protección ambiental a la zona del delta del río Paraná. Además, exigió información catastral a Entre Ríos para detectar a los propietarios de los campos donde se generan los focos de incendio.

El aire de la ciudad continúa viciado por el humo proveniente de las islas y a pesar de que el pasado viernes se firmó un convenio que suspendía por 180 días la quema de pastizales, el sábado, casi como una provocación, encendió con más fuerza.

Por este motivo la provincia había solicitado una ayuda urgente a Nación:

«Desde el gobierno provincial solicitamos la declaración de emergencia en la zona de islas del Delta del Paraná. Es un herramienta fundamental que el ministerio de Ambiente nacional, a cargo de Juan Cabandié, haya declarado como zona crítica de protección ambiental”, destacó la ministra de Ambiente y Cambio Climático, Erika Gonnet.

Se inmediato Nación accionó tomando una resolución por parte del Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible de la Nación. A partir de hoy estará prohibida toda quema en la zona durante los próximos 180 días y la vecina provincia de Entre Ríos deberá aportar “los datos catastrales y de titularidad dominial a fin de identificar los propietarios de las zonas afectadas por el fuego en el marco del plan de fiscalización”.

 

Los dueños de los terrenos

Durante el pasado viernes por la noche se revelaron los nombres y apellidos de los productores en cuyos campos se detectaron quemas: Pablo Rufino Baggio; César Perpecto Aguiar; Hipólito, Juan y José Luis Maceratesi; Alberto, Daniel y Graciela Chiartano; y Luis Carlos Pérez.

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