Héctor Olivares, el diputado nacional atacado a balazos este jueves por la mañana en la Plaza del Congreso, murió como consecuencia de los disparos recibidos en el abdomen. Marcelo Yadón, el funcionario riojano que lo acompañaba y que también fue atacado, murió casi en el acto.
El legislador de Cambiemos por La Rioja se encontraba en «estado crítico» y presentaba «una falla multiorgánica», según los últimos partes médicos. Desde el jueves se encontraba internado bajo asistencia mecánica respiratoria. Olivares había sido ingresado al hospital Ramos Mejía, minutos después del ataque, donde fue operado de urgencia. Los disparos habían afectado su corazón, pulmones y riñones.
Su familia había expresado, horas antes, el agradecimiento por todas las muestras de afecto recibidas hacia el dirigente radical. «La familia Olivares agradece todas las muestras de afecto, cadenas de oración y apoyo y agradece especialmente al Hospital Ramos Mejía por lo que están haciendo por la recuperación de Héctor», indicaron a través de la cuenta de Twitter del diputado.
El primero que expresó su profundo dolor al conocer la noticia fue Federico Pinedo, presidente provisional del Senado, mediante un mensaje en su cuenta de Twitter.
Un gran dolor la muerte del diputado Olivares. Un fuerte abrazo a su familia, correligionarios y amigos.
— Federico Pinedo (@PinedoFederico) May 12, 2019
https://www.youtube.com/watch?v=4n98ejDPCYk