Una merienda saludable debe aportar nutrientes, energía y saciedad sin ser demasiado calórica ni pesada. Además, en el verano es recomendable que sea refrescante.
La merienda es una de las comidas principales y los especialistas recomiendan no saltearla para evitar llegar a la cena con mucho apetito.
Para que sea equilibrada es conveniente que tenga todos los grupos de alimentos: hidratos de carbono, proteínas y grasas.
Alimentos infaltables
- Palta: es una fruta rica en grasas que aporta saciedad ideal para agregar a las tostadas y sándwiches.
- Humus con palitos de zanahoria: se prepara con un puñado de garbanzos y ajo, una cucharadita de limón y de aceite de oliva. Triturar y acompañar con los bastones de zanahoria.
- Tomate: es un alimento que se puede combinar con tostadas y sándwich muy fresco y aporta pocas calorías.
- Frutas: en ensalada, brochete, licuados o con cáscara todas las opciones son refrescantes.
- Smoothies y helados: es otra opción para sumar frutas. Se pueden hacer con leches de origen vegetal o animal, cacao amargo, hielo, agua y las frutas preferidas.
Opciones prácticas
La licenciada en Nutrición Gimena Corso comparte opciones rápidas para la merienda:
- Café con leche, una porción de budín y una banana.
- Mate, tortita en taza y una naranja.
- Galleta de arroz, mantequilla de maní y una manzana.
- Yogur natural con granola y frutas picadas.
- Licuado de frutas, dos galletas de avena y un puñado de frutos secos.
- Mate, un sándwich de palta y queso o huevo, una mandarina.
- Un vaso de leche con avena, cacao amargo y frutillas.
- Una tostada de pan integral con ricota y palta, un café.
- Mate, una rapidita con queso magro, palta, hojas de espinaca y tomate.