Mega decreto de Milei: “Hay un intento mesiánico refundacional de destruir una estructura jurídica estatal”
El decreto de necesidad de urgencia de Javier Milei, que propone desregular la economía argentina, suma reacciones y voces en contra.
“Dos reflexiones. Una de forma, o en torno a la forma con la que pretende hacer esto. El artículo 99, inciso 3 de la Constitución Nacional, establece como regla que el Poder Ejecutivo no puede ejercer funciones legislativas. Y dice, textualmente, bajo pena de inmunidad absoluta e insanable. Y además dice la Constitución que los DNU son una excepción, pero son una excepción reglada, que tiene claras reglas. Derogar y modificar más de 300 leyes en un solo mega DNU es un intento de acumular la suma del poder público que también está vedado por la Constitución en su artículo 29”, expresó, al aire del programa El Puente, que se emite por Radio Mitre Rosario, Eduardo Toniolli, diputado nacional de Unión por la Patria, por Santa Fe.
“Y de fondo -prosiguió-, el DNU es un intento, lo dice el mismo Presidente de la Nación, refundacional de la Argentina, por supuesto yo tengo una evaluación radicalmente distinta a la del Presidente, es un intento refundacional en el sentido negativo, porque lo que pretende hacer es por vía expeditiva derogar una serie de normas que en algunos casos son protectivas de los derechos de los trabajadores, pero que en otros casos, además, son una defensa de la Argentina misma para sostener, por ejemplo, su integridad territorial”.
Seguido, el legislador nacional dio como ejemplo “la ley de tierras, que establece, por ejemplo, un tope del 15% a la tenencia externa en manos de extranjeros, incluso por cada una de las jurisdicciones del país. La ley de manejo del fuego, por ejemplo, se intenta modificar una ley, ya que durante estos últimos dos años discutimos la ley de humedales que intentaba dar un pasito más en términos de protección al ambiente, derogar o modificar, como se pretende la ley de manejo del fuego, es dejar aún más a nuestra naturaleza inerme frente a los procesos de quema para especular inmobiliariamente después”.
Del mismo modo, cuestionó que derogar la ley que exige la aprobación de Congreso para la privatización de las empresas públicas, “es un intento por cargarse con el patrimonio nacional, sin siquiera permitir que se discuta en el ámbito por antonomasia de la democracia, para que los argentinos, entiendan, ante cada una de estas decisiones, qué es lo que puede pasar con la inversión de generaciones de trabajadores en el Estado, porque esos son, en última instancia, las empresas públicas, que son de todos”.
“Y así con un montón de artículos de este DNU, que no tienen absolutamente nada que ver, nada que ver, y cité a algunos de ellos, con alguna situación de emergencia o con la pelea contra la inflación, te diría más, varios de ellos, en lo que refiere a las prepagas, a las tarjetas de crédito, etc., tienen un objetivo inflacionario, en última instancia, de favorecimiento a alguna corporación económica poderosa”, agregó.
Respecto a los pasos a seguir que analiza ese sector de la oposición, Toniolli adelantó: “En materia institucional, claramente lo que hay que hacer acá es apurar la conformación de la bicameral que trata los DNU, un DNU puede ser aceptado si una sola de las cámaras lo vota positivamente, o rechazado exclusivamente si tiene el rechazo, valga la redundancia, de las dos cámaras. Ahora bien, esto de alguna manera no es producto exclusivamente del juego legislativo, sino también del posicionamiento de la sociedad. Sabemos que hay distintas fuerzas políticas que son sensibles al posicionamiento de distintos sectores de nuestra vida económica”.
Además, el diputado enfatizó: “Hay un intento mesiánico refundacional de destruir, una estructura jurídica estatal que llevó muchos años construir, que posiblemente pueda tener sus cosas a reformar, no hay ninguna duda de eso, y que posiblemente también haya fallas en el Estado a la hora de hacer efectivo el cumplimiento de esas normas y es gran parte también del problema que tenemos como país y como sociedad”.
“Ahora, pretender hacer esto con un único DNU que deroga o modifica más de 300 leyes se da de frente con la Constitución Nacional y de eso no hay ningún tipo de duda. Después pueden hacer la alquimia que quieran, pero no hay ningún tipo de duda que esto es lisa y llanamente inconstitucional, porque básicamente se pretende legislar algo que la Constitución no le permite al Poder Ejecutivo”, concluyó Toniolli.