María Eugenia Schmuck, la presidenta del Concejo municipal, ayer encabezó la lista de concejales más votadas, de la mano del Frente Unidos para Cambiar Santa Fe, que además se impuso en las cinco categorías.
“Para nosotros es un espaldarazo, un gran respaldo, pero a la vez un enorme compromiso. Sentimos el deber de honrar esta confianza que la gente ha depositado en nosotros el día de ayer y bueno, si el objetivo de ocupar una responsabilidad pública como siempre ha sido es trabajar las 24 horas del día, los siete días de la semana para poder honrar la confianza que los vecinos y vecinas han depositado en nosotros, bueno ahora se redobla”, expresó, al aire del programa El Puente, que se emite por Radio Mitre Rosario, Schmuck.
Respecto a la elección a intendente, que enfrentó al actual mandatario Pablo Javkin y a Juan Monteverde, donde por un ajustado margen el oficialismo logró imponerse, analizó: “Sabíamos que iba a ser una elección muy reñida, porque era la primera vez que quedaban en la ciudad de Rosario dos candidatos a intendente, casi un ballotage, y después de cuatro años que fueron muy difíciles para nosotros. Fundamentalmente porque tuvimos dos años para llevar adelante muchas de las políticas que imaginábamos, que soñábamos cuando se unimos, pero esa segunda oportunidad, esa confianza, para el segundo periodo que nos ha dado la gente, significa saber que tenemos que trabajar aún mucho más para todo lo que falta, para mejorar muchos de los temas importantes de la ciudad y para trabajar en conjunto con el gobernador electo”.
“Esas expectativas en alinear provincia y municipio que teníamos, como unidos para cambiar Santa Fe, también fue un poco la esperanza que la gente depositó en nosotros y ya estamos trabajando para que, a partir del 10 de diciembre, tanto provincia como municipio trabajen para que Rosario esté en el lugar que se merece, que es mucho mejor de lo que estuvo otra hora”, amplió la edil.
En tanto, sobre su elección, con una victoria muy contundente, obteniendo más del 39% de los votos, reconoció que no esperaba un resultado así. “Porque uno siempre milita, trabaja con mucha humildad, poniendo el cuerpo, la cara, en tiempos muy difíciles, donde recorrimos durante estos cuatro años toda la ciudad, aún en pandemia, trabajando para mejorar, aunque sea un poquito, la calidad de vida de los vecinos y las vecinas de la ciudad, y, aspirábamos a que la gente nos dé su confianza, la oportunidad de seguir trabajando por Rosario, porque es una ciudad que amamos y que esta actividad la hacemos con mucha pasión, con mucho amor”.
“El resultado también es producto de un equipo que se consolidó después de las primarias, con muchos espacios que componemos unidos para cambiar Santa Fe, que decidimos trabajar juntos, planificar juntos cómo ha ido a ser nuestro laburo en el Concejo de ahora en más, y la gente también apostó a ese equipo que se construyó, y eso para nosotros es un doble compromiso, porque también implica trabajar sobre nuestras coincidencias”, remarcó Schmuck.
Asimismo, destacó que “Rosario necesita que la política se ponga de acuerdo, no solo en los temas estructurales, sino en la forma de construir, y es algo que intentamos hacer en estos cuatro años en el consejo, y creo que es una dinámica política que llegó para quedarse, y que vamos a tratar de reproducirla y de multiplicarla en estos años que quedan por delante, porque es lo que se merece la ciudad, ni más ni menos”.
Y se refirió a la nueva etapa en el Concejo, donde adelantó que primarán los consensos: “Voy a trabajar para acordar con aquellos con los que tenemos algunas diferencias pero que hemos sabido construir juntos, es importante escuchar sobre todo al que piensa muy distinto, al que construyó una alternativa diferente, porque siempre las normativas, las políticas se enriquecen de las voces diferentes, eso es lo que aprendí en estos cuatro años. Y es una dinámica que me parece que le hace muy bien a la política, a la gestión. Hay mucha gente que lo está pasando mal en la ciudad, en la provincia, en el país, y requiere de nosotros de la madurez suficiente para dialogar, para ponernos de acuerdo, y para trabajar que en estas diferencias se conviertan en una mejor normativa, en una política mucho más eficaz, y ese es el desafío”.