En el último tiempo, ha crecido de forma exponencial la cantidad de lugares que ofrecen tratamientos estéticos no invasivos. Si bien se trata de intervenciones que no involucran internación ni anestesia, hay ciertos recaudos que hay que tener en cuenta y es importante contar con información precisa antes de comenzar.
¿Los resultados prometidos tienen algún respaldo científico?, ¿La tecnología que usan en el centro es original? ¿Está certificada por la ANMAT u otros organismos internacionales que me aseguran que el tratamiento es seguro y que da resultados?
Tanto el centro como los equipos que se ofrecen tienen que contar con la certificación de la ANMAT correspondiente para brindar tratamientos estéticos. La ANMAT emitió una circular en relación a este tema, a partir de la cual estableció ciertos criterios de control sanitario para las tecnologías de uso estético y los centros en donde se ofrece.
“Existe una plataforma muy reconocida internacionalmente que se llama realself.com. Es una plataforma independiente a las marcas de la industria en donde solo figuran tratamientos serios que cuentan con la aprobación de la FDA -la Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos- y pacientes reales dejan sus comentarios sobre su experiencia, fotos de antes y después, y hasta votan si vale la pena o no hacérselo. Cada tratamiento tiene un porcentaje basado en la efectividad del mismo según los comentarios de los pacientes. Si un tratamiento o tecnología no figura en esa plataforma, es porque no tienen el respaldo científico suficiente para tener la aprobación de la FDA.” explica la Dra. Velia Lemel, médica dermatóloga.
La tecnología debe estar aprobada por la ANMAT
No todas las tecnologías cuentan con un respaldo científico fuerte. “En materia de estética no se hacen muchos estudios de investigación, se lanzan nuevos aparatos constantemente al mercado y por la gran demanda de tratamientos, los profesionales los adquieren. Muchas veces las máquinas que se compran no tienen respaldo científico” menciona la Dra. Valeria López Mecle, especialista en Medicina Estética y Nutrición.
“La tecnología siempre debe estar aprobada por la ANMAT (cada equipo debe tener un número de registro correspondiente) y, si son equipos importados, es relevante que tenga la certificación de la FDA que es el organismo de control más importante del mundo y referente a la hora de certificar tecnología médica. ya que significa que cuenta con una evidencia científica sólida que respaldan los resultados y la seguridad de los pacientes”, agrega la Dra. Lemel.
Además, la comunicación con el paciente debe ser clara y se le debe brindar toda la información necesaria para evacuar sus dudas, tanto al elegir un tratamiento, durante el mismo, y en el post-tratamiento.
Los protocolos de distanciamiento
La segunda ola de Covid-19 está entre nosotros y las medidas de prevención, seguridad y distanciamiento no deben ser dejadas de lado.
Evitar el amontonamiento de pacientes en sala de espera, asegurarse de que la aparatología cuente con la higiene y desinfección necesaria y el uso de DDJJ por parte del establecimiento son algunas de las pautas que nos indican si un lugar es seguro.
“Con el paso de los años, surgieron innumerables imitaciones de tecnologías innovadoras que se ofrecen a un menor precio sin tener respaldo científico ni estudios serios que garanticen los resultados, ni que el paciente esté seguro al momento de hacerse un tratamiento. Aquellos pacientes que van a invertir para verse o sentirse mejor, deben tener siempre en cuenta que, si bien es ‘estética’, su salud también está expuesta. Por eso siempre es importante investigar e indagar un poco más antes de perder tiempo y dinero en tratamientos que ofrecen falsas promesas” finaliza la ingeniera biomédica Cecilia Molas.
Comentarios
Para comentar, debés estar registrado
Por favor, iniciá sesión