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viernes 19 de abril del 2024

«Lo peor es no saber cómo está Kiki»

Es miércoles por la tarde y Cristina Morla y Sergio Gigliotti están sentados en los estudios de Radio Mitre Rosario. Los intentos de los conductores y productores de el programa  El Puente de Verano por cambiar el aire durante enero, por volverse un programa tan de entretenimiento como de información, se desvanecen. Hay un dolor y una tristeza que son inevitables, contagiosos; que no deprimen, ni arruinan un programa, pero que sí cambian el ambiente. Y es que Cristina y Sergio están dialogando con distintos medios, van de cámara en cámara, buscando recursos e interlocutores, con un solo objetivo: recuperar a Kiki. El niño de 3 años estuvo de bebe con ellos por el programa de Familias Solidarias.  Iban a ser seis meses, fueron dos años: más que suficiente para que se adopten mutuamente.

– ¿Cuándo empezaron a pensar en que Kiki se quede con ustedes? -, pregunta, al cierre de la entrevista, el conductor Andrés Cánepa.
– Dejame preguntarte, ¿vos tenés novia?
– Sí.
– ¿Vos me podes decir el día exacto en que te enamoraste?
– No.
– Nosotros tampoco. Así de simple.

Sergio y Cristina cuentan su historia una y otra vez desde que, a principio de año, la Subsecretaria de Niñez les quitó a Kiki, su hijo de 3, bajo el argumento de que había finalizado el plazo de tenencia por el programa de «Familia Solidaria» (en donde padres pudientes adoptan a chicos carenciados durante 6 meses hasta que se los reubica en una familia definitiva). El problema es que pasaron casi 2 años y el chico no sólo creció, sino que estableció un vínculo afectivo con sus padres.

«Kiki vos nos elegiste, no te damos la espalda» es el lema que tiene la familia. Según comentaron, al momento de que se inició todo su idea no era adoptar. Esa determinación no fue algo arbitrario. Pasó que creció el amor, y como dicen ellos, Kiki los eligió. Por eso luchan por él, por eso mueven cielo y tierra para recuperarlo.

«Esto no es una pulseada, no es a ver quien gana, quién tiene razón, a mí no me importa. Nosotros estamos convencidos de que somos los papás, porque él nos eligió. La prioridad la tiene él», contó Gigliotti.

Mientras se espera que finalice la feria judicial y haya una solución, Kiki está en una localidad cercana a Santa Fe, en San Carlos. «Tratamos de resguardarlo, soy periodista en Santa Fe y le pedí especialmente a los colegas allá que no aborden el tema. Preservemos a Kiki y a la familia que lo está conteniendo en este momento», explicó Sergio. Gigliotti volvió a aclarar que el deseo de su hijo es quedarse con su familia: «La ley suprema es la que establece el bienestar del niño, si a Kiki  hoy vos le preguntás con quién quiere estar, va a decir con mamá Cristina, va a decir ‘Segio'». Y preguntó: «¿Por qué no se lo escucha a él?«.

Pese a que junto a Cristina están viviendo sus días más difíciles, Sergio no pierde esperanzas y confía en la justicia: «Nosotros tenemos mucha fe en la justicia, creemos que la justicia no puede desoír esto. Nosotros no pedimos que se vaya ni renuncia nadie, nosotros queremos que Kiki vuelva al centro de vida que tuvo desde hace casi 2 años».

«La causa está en una posición cerrada para que Kiki esté donde esté y no esté con nosotros. Hay feria judicial, está nuestra presentación de guardia pre adoptiva», agregó.

La subsecretaria de la Niñez tomó la determinación de ubicar al niño con su hermano: «La doctora Mónica Barroso nos informó que teníamos que entregar al niño, esa fue la palabra que usó». Y agregó: «Con Cristina habíamos tomado el compromiso frente a Kiki de vincularlos con los hermanitos que él sabía que tenía, buscarlos y darles la posibilidad de conocer su familia, porque es un derecho que tiene».

«La doctora Mónica Barroso nos informó que teníamos que entregar al niño, esa fue la palabra que usó»

«La jueza no ha anunciado palabra, hasta ahora ha hecho correctamente su papel, está esperando que la parte administrativa finalice para ella empezar a trabajar de lleno con todo esto. El juez va a hablar únicamente con un fallo, nosotros tenemos esperanza en eso», declaró el entrevistado en relación al estado de la causa.

El martes, los padres se pusieron en contacto con Analía Colombo, de la defensoría de la Niñez  y con Raúl Lamberto, Defensor del Pueblo. Ambos asumieron el compromiso de informarles por semana cómo se encuentra el niño de 3 años. «Lo peor que nos puede pasar es no saber es cómo está Kiki».

«Lo peor que nos puede pasar es no saber es cómo está Kiki»

Sergio no sólo tiene confianza en la Justicia, también tiene esperanzas con el accionar de Miguel Lifschitz: «También tengo mucha confianza y fe en el gobernador, me ha tocado escuchar de la importancia que tenía para él el bienestar de los niños. Por ahora no hemos podido hablar, quizás tiene cosas más importantes pero para nosotros lo más importante es Kiki».

Por último, Sergio Gigliotti se dirigió a todas las personas que les toque vivir una situación similar a la de él y su esposa: «A las familias les diría que hagan lo que le dicta el corazón, no hay un formato, modelo o forma de luchar. A nosotros el corazón nos dijo que teníamos que pelear por Kiki, que hagamos lo imposible para que vuelva a casa, con sus juguetes».