En las primeras horas de este miércoles, se conoció una triste noticia para el periodismo rosarino: falleció a los 75 años Luis Alberto Yorlano, el reconocido conductor del programa «Fútbol Sin Trampa» de Canal 5, por causa de un cáncer pulmonar.
Rosario Nuestro se contactó con quien fuese compañero del «Pelado» durante muchos años en la televisión y en la radio, el periodista Maximiliano Raimondi, que con mucho cariño lo recordó: «Fue para mí, de manera indiscutida un referente en lo profesional por la pasión y el compromiso a la hora de trabajar. Un animal del laburo”.
“Laburó prácticamente hasta el último día, el sábado me llamó diciéndome que lo habían internado y me pidió que lo reemplazara en el programa. Estuvo pendiente de Fútbol Sin Trampa hasta horas antes de su fallecimiento”, contó el notero del noticiero de Canal 5 y añadió: “Me dijo: me trajeron engañado al sanatorio, porque si me decían que me iban a internar, no venía porque mañana (el domingo) tenía que hacer el programa”.

Raimondi tuvo palabras eternas de agradecimiento para quien mencionó como su «padrino» periodístico: “Le debo muchísimo, fue un tipo muy generoso conmigo, gracias a él empecé a incursionar en los medios de Rosario. Cuando llegué a la ciudad la primera oportunidad me la da él y en la tele”.
“No sólo me abrió las puertas, sino que también me acompañó en el proceso, en mi crecimiento, dándome más participación en el programa, siendo una parte fundamental para que vaya a cubrir el Mundial de 2010, hizo mucha fuerza para que pueda estar en el noticiero de Canal 5”, destacó el joven periodista.
A su vez, contó que cuando le empezaron a surgir posibilidades laborales por fuera de «Fútbol Sin Trampa», a Yorlano le causaba una gran satisfacción: «Decía que su mayor satisfacción era que le roben los pibes que trabajaban con él”.

En referencia a cómo era el día a día de Yorlano en lo laboral, Raimondi aseguró: “En el trabajo era súper exigente, tenaz, que tenía tanta pasión por lo que hacía que esperaba lo mismo de los demás, así que no era fácil seguirle el ritmo, no era fácil laburar al lado de él, había que bancarsela”.
“Se ponía loco y puteaba pero era como cuando uno juega un partido de fútbol que estás con las pulsaciones a mil y te puteas con un compañero o tenés un mal gesto con el técnico pero es producto del juego, así era el Pelado: un loco lindo trabajando”, agregó Maxi y continuó describiendo cómo era el reconocido periodista con las cámaras apagadas: “Todo lo rígido y estructurado que era tabajando, era todo lo contrario cuando terminaba el programa y te vas a tomar un vino: una persona amable y divertida”.
La relación entre Yorlano y Raimondi se hizo mucho más fuerte que sólo lo laboral. «A él y a su mujer, Rita, los aprendí a querer como parte de mi familia, me acompañaron mucho en la enfermedad de mi viejo, así que desde ese momento el Pelado ya no era mi jefe sino un amigo o parte de mi familia».
“Quiero hacer una mención especial a Rita, porque es necesario destacar el amor y el acompañamiento que tuvo por parte suya en estos siete años de su enfermedad”, cerró el joven notero, que recordó de forma emotiva al hombre que marcó un antes y un después con respecto a su incursión en los medios rosarinos.