Las pérdidas por la sequía en la región alcanzaron los 10.425 millones de dólares y la situación continúa empeorando. La Bolsa de Comercio de la ciudad reportó que el monto borraría 2,2 puntos del PBI estimado para este año.
En profundidad, la problemática causada por los fuertes calores y las escazas lluvias ya se cobró 28,5 millones de toneladas de cosechas entre maíz, trigo y soja que no pudieron cultivarse. Según los especialistas, se desperdició un 23% de la producción inicial esperada.
Desde la institución local encargada del relevamiento confirmaron: “Cuando hablamos de la pérdida de ingresos netos del sector productor nos referimos a la diferencia entre el margen neto del productor que éste estimaba al momento de la siembra, con un rinde promedio en condiciones climáticas normales, y el que se prevé a la fecha, como consecuencia de la sequía”.
Cabe destacar que el estudio de la Bolsa de Comercio rosarina contempla la pérdida de rendimientos a causa de la sequía. Un caso puntual que señalan desde la entidad es el de las hectáreas sembradas que dejarán de ser herramienta de cosecha ante la situación adversa.
Según afirman los expertos, las pérdidas continúan en el ámbito de los servicios financieros, de transporte y de construcción. Todos los sectores mencionados se ven afectados por la crisis en el agro debido al tiempo.
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