El próximo domingo, a partir de las 14, Central y Newell’s se verán las caras por la fecha 7 de la Copa de la Liga Profesional y este miércoles se pulieron los detalles del operativo de seguridad que se montará en el Gigante de Arroyito y en distintos puntos de la ciudad.

El  director de Seguridad Deportiva Marcos Romero, que estuvo reunido en sede de gobernación junto a los presidentes Rodolfo Di Pollina e Ignacio Astore, dialogó en conferencia de prensa para dar precisiones de los distintos procedimientos que realizará el Ministerio de Seguridad de Santa Fe.

«Definimos que el estadio de Rosario Central permanecerá cerrado desde el sábado a partir de las 18 donde va a ver una custodia por parte de la Policía de Rosario y a partir de las 11 de la mañana se abrirán las puertas para el público», anunció el funcionario.

«Habrá un total de 672 efectivos policiales afectados solamente para el Gigante de Arroyito y en las inmediaciones otros 300 más», continuó.

Romero también explicó que el operativo policial arrancará varios días antes por razones de seguridad: «El día del partido habrá controles en el estadio de Central y también en el de Newell’s. También tendremos custodia en más de 50 dependencias de ambos clubes a partir del viernes. El club visitante aún no hizo la propuesta del Banderazo pero no tendremos inconvenientes en prestar servicio».

Con respecto al trasaldo de ambas delegacones, el funcionario provicial destacó: «En Arroyo Seco se encapsulará al plantel de Central hasta el estadio, lo mimso va a pasar con Newell’s desde zona oeste hasta Arroyito».

Y en relación a los protocolos de higiene por la pandemia, Romero cerró: «Los controles se basará en observar que los simpatizantes lleven el barbijo y el pase sanitario en todas las bocas de ingreso de la cancha».